Legisladores de las principales fuerzas políticas en la Cámara de Diputados y el Senado presentaron diversas iniciativas para reformar la Ley del Impuesto sobre la Renta (ISR), a fin de exentar a las pensiones del pago del gravamen. Senadores del PAN y el PRD, así como diputados del PRI, el PT, Nueva Alianza y Convergencia, manifestaron su rechazo a que se realice un nuevo acto de injusticia.

El senador panista Juan Bueno Torio y el perredista Tomás Torres presentaron ante el pleno una reforma casi idéntica, con el argumento de que aplicar el ISR a las pensiones, como sucedió recientemente con los jubilados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es una doble tributación, que perjudica a un sector que ya enfrenta una situación económica difícil.

En su propuesta, Bueno Torio resaltó que gravar con el ISR a los trabajadores ya jubilados del IMSS es contrario a lo establecido en el artículo 123 constitucional, en el que claramente se señala que sólo podrán hacerse retenciones, descuentos, deducciones o embargos al salario.

El perredista Torres hizo notar que las pensiones y otros haberes relacionados con la seguridad social son el resultado del esfuerzo de toda unaa vida laboral. Este fondo se constituye, recalcó, gracias a las contribuciones regulares provenientes del salario, el cual ya fue objeto del cobro de impuestos. Es un abuso, por tanto, que de nueva cuenta se graven las pensiones, afirmó.

En la Cámara de Diputados, el Partido del Trabajo presentó otra iniciativa para frenar el cobro del ISR a las pensiones, propuesta que fue respaldada por el PRD, el PRI y Nueva Alianza, mientras que, en contraparte, Acción Nacional argumentó que tal cobro no viola ninguna norma.

Mario Alberto Becerra Pocoroba, presidente de la Comisión de Hacienda, reiteró que la aplicación del gravamen se encuentra establecido en la ley: el caso de las pensiones no es nuevo. Desde 1976, la Ley del ISR establece que hasta en nueve salarios mínimos las pensiones están exentas. Lo que aquí sucede es que no se había aplicado la ley, y por tanto, quienes recibían más de nueve salarios mínimos se encontraban fuera de la aplicación del gravamen.

El priísta Miguel Ángel García Granados expuso que su partido analizará la modificación a la Ley del ISR, por la gravedad que implica en los ingresos de los pensionados, al considerarlo como un acto de injusticia.

Mauricio Toledo, diputado por el PRD, señaló que es inconcebible que la administración de Felipe Calderón continúe gravando a los más pobres, mientras que Roberto Pérez de Alba, diputado por Nueva Alianza, se sumó a la iniciativa, al considerar que no podemos avalar dobles cobros a los pensionados, pues el recurso destinado a su pensión ya fue gravado en su momento.

En tanto, la dirección nacional de Convergencia, y sus senadores y diputados federales, también demandaron al gobierno federal suspender de manera inmediata el cobro del ISR a jubilados y pensionados del IMSS, pues consideraron que la decisión del Ejecutivo se suma al caudal de impuestos con que recibió 2010 a los trabajadores del país, particularmente a casi 60 millones de connacionales sumidos en la pobreza.

Con estas medidas, enfatizó, empeoran las condiciones que debieran darle gobernabilidad y estabilidad al país. Persevera y crece el desempleo como crecen también la inseguridad, la incertidumbre y la desconfianza en la vida institucional.