La Iniciativa Mérida se prolongará más allá de los tres años previstos originalmente, pero no será un programa permanente, dijo ayer un funcionario del gobierno de Estados Unidos, mientras que el embajador de ese país en México, Carlos Pascual, felicitó a nombre de la Casa Blanca a la administración del presidente Felipe Calderón y a las autoridades de Baja California por el arresto de Raydel El Muletas López Uriarte y de Manuel El Chiquilín García Simental, integrantes del cártel de Sinaloa.

El diplomático destacó que el gobierno del presidente Barack Obama se mantiene plenamente comprometido con la cada vez más estrecha cooperación entre los dos países para la procuración de justicia, al igual que con la Iniciativa Mérida.

La creciente capacidad operativa del gobierno mexicano para  detectar, investigar y detener a narcotraficantes demuestra su compromiso con el estado de derecho y la seguridad de sus ciudadanos, añadió Pascual en un comunicado, en el que se presume que los dos detenidos son responsables de múltiples asesinatos y secuestros violentos relacionados con el narcotráfico a gran escala en Baja California.

Por su lado, el funcionario del gobierno estadunidense destacó que como parte de la Iniciativa Mérida se dará atención a los aspectos sociales relacionados con el tráfico de enervantes.

Por ejemplo, se capacitará al personal de los centros de rehabilitación Nueva vida y se apoyarán los consejos de participación cívica, para apoyar un mayor involucramiento de la ciudadanía en la solución del problema.

Sin una mayor participación de la sociedad no habrá progreso en esta materia, enfatizó.

El funcionario señaló también que como parte de la Iniciativa Mérida habrá mayor cooperación de su gobierno con las autoridades locales y municipales, vínculo que al iniciarse la estrategia estaba constreñido a las autoridades federales.

Por último, dijo que en su país se analiza la posibilidad de crear juicios contra vendedores de armas. Ello con el fin de cortar el tráfico ilegal de armamento a México.