Martes 9 de febrero de 2010, p. 21
Durante 2009 el financiamiento para comprar vehículos, que otorgan tanto las empresas automotrices (a través de Sofomes y Sofoles) como la banca comercial, cayó 34 por ciento en comparación con 2008, indicó Luis Gómez Sánchez, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores (AMIA). Explicó que la crisis financiera obligó a que los bancos cerraran líneas de crédito a la gran mayoría de financieras de marca automotrices en México. Los bancos endurecieron los requisitos para el acceso a los créditos, de modo que mientras en 2008 de cada 10 solicitudes se aprobaban entre seis y siete, en 2009 sólo se aceptaron entre tres y cuatro de cada 10, lo que llevó a la pérdida de 200 mil créditos.