El rechazo a la política económica del gobierno de Felipe Calderón, la demanda de un aumento salarial de emergencia y el respaldo a las luchas de los electricistas y los mineros, serán las banderas de la marcha convocada para el 29 de enero por organizaciones como la Confederación Nacional Campesina (CNC), la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y el Frente Sindical Mexicano.

Según el acuerdo final tomado por estas organizaciones, la marcha arrancará a las 16:30 horas del Ángel de la Independencia e irá hacia el Zócalo, donde en un mitin, además de los cinco oradores programados, habrá un pronunciamiento conjunto.

El Sindicato Mexicano de Electricistas, que integrará uno de los contingentes en esta concentración, había planteado inicialmente que la marcha fuera hacia Los Pinos, sin embargo, acordó acompañar la manifestación hacia el Zócalo capitalino. No se descarta, sin embargo, que el gremio pudiera ir después hacia la residencia oficial o incluso realizar un plantón en las inmediaciones, según señalaron representantes del gremio.

En la reunión que realizó ayer la UNT conjuntamente con representantes del sector campesino, mineros y electricistas, el acuerdo es marchar juntos en demanda de un cambio del modelo económico del país y el cese a la persecución de los gremios independientes.

En ese foro insistieron en que paralelamente buscarán una mesa de diálogo, pero en la Secretaría de Gobernación, ”no con el titular del Trabajo, Javier Lozano, porque trae el ánimo muy belicoso. Necesitamos que se tranquilice”, planteó el presidente colegiado de la UNT, Francisco Hernández Juárez.

Quien operó para encontrar un espacio de diálogo en la Secretaría de Gobernación, donde se abordarán diversos asuntos, fue Cruz López Aguilar, dirigente de la CNC, que será una de las organizaciones participantes en esta primera movilización del año.

En la UNT, sindicatos como el de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, sobrecargos, pilotos, bomberos, profesionistas petroleros, entre muchos otros, confirmaron su participación en la marcha, así como los telefonistas, cuyo dirigente, Hernández Juárez, dijo que afortunadamente no se está buscando el diálogo o la interlocución con Lozano, porque entonces tendríamos que esperar un trato como el que les da a los mineros o a los electricistas.

Señaló que obviamente van a incorporar a Lozano a las mesas en Gobernación, pero el hecho de que el funcionario no esté en su terreno le lima un poco las uñas. Sostuvo además que en esta movilización del viernes, campesinos, sindicatos y organizaciones sociales van juntos en la demanda de cambio de política económica, por programas que fortalezcan al campo y acciones para controlar el precio de los productos básicos.