Tuxtla Gutiérrez, Chis., 22 de enero. Indígenas que habitaban desde hace 20 años los poblados El Semental y San Pedro, en la reserva de la biosfera de Montes Azules de la selva Lacandona, fueron desalojados por policías federales, efectivos del Ejército Mexicano y personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

Durante una visita a la entidad efectuada el martes pasado, Patricio Patrón Laviada, titular de la Profepa, acordó con el gobierno del estado agilizar el desalojo de unos ocho poblados que se ubican en la reserva de la biosfera.

Horas después, cientos de policías y militares sacaron a unas 20 familias que habitan la zona. Al cierre de esta edición no se sabe dónde se encuentran los expulsados, quienes en dos ocasiones anteriores habían sido desalojados, pero ante la falta de otro lugar donde vivir, regresaron a la selva.

Una fuente del gobierno estatal informó que el desalojo fue pacífico y existe el compromiso de que las familias que salieron serán reubicadas fuera de la selva. Sin embargo, personal federal reportó que al llegar al lugar no encontró a nadie, ya que las familias habían huido horas antes.

Lacandones que reclaman la selva y resultaron favorecidos por el desalojo enviaron al gobierno del estado una carta en la cual piden recursos para reforestar las zonas conocidas como lagunas Yaqui, Ojos Azules y El Suspiro.

En la misiva, firmada por Carmelino Flores Montejo, Antonio Velazco Gutiérrez y Mariano Flores Montejo, explican que esos terrenos serán ocupados por 20 comuneros (lacandones) de Nueva Palestina, los cuales pretenden establecer ahí un centro turístico.