El aspecto presupuestal será el que finalmente marque el ritmo de cómo se habrá de instrumentar la sustitución de las credenciales de elector por una nueva, fusionada con los datos biométricos que pretende incorporar la Secretaría de Gobernación, como parte del acuerdo con el Instituto Federal Electoral (IFE). Este factor es uno de los que se debe discutir centralmente y afinar como parte del convenio que firmarán ambas partes.

En tanto, el IFE ya recibió formalmente el oficio remitido por la Comisión Permanente del Congreso de la Unión en el que los legisladores exhortan a Gobernación y al propio instituto “a que establezcan una mesa de diálogo de alto nivel, en la que participen, además de los titulares de ambas, los dirigentes nacionales de los partidos políticos y los presidentes de las comisiones de Gobernación y de la Función Pública de la Cámara de Diputados.

Además deberán participar el presidente de la Comisión de Gobernación del Senado y los titulares de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y la comisionada presidenta del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI).

Al respecto, el consejero Alfredo Figueroa dijo que esa comunicación es un primer paso para que partidos políticos y legisladores se incorporen a lo que hasta ahora han sido conversaciones sólo entre Gobernación y el IFE. Sin embargo, consideró que deberá ser el Consejo General del instituto la instancia que fijará la forma en que colaboraría en estas mesas de alto nivel, como lo solicitan diputados y senadores.

El exhorto surgió a raíz de la inconformidad de algunos legisladores por la marginación del Congreso de la Unión en las discusiones y polémica entre el IFE y Gobernación en torno a la credencial de elector y la cédula de identidad.

Para un sector de consejeros del IFE, la inclusión de los partidos políticos en las discusiones debería realizarse por la vía de los representantes de éstos en el Consejo General.

En su caso, si para los fines que pretende Gobernación se requiere discutir temas ajenos estrictamente a las tareas del IFE, pudiera ubicarse otra mesa de discusión para conversar en torno a aspectos ligados con la seguridad o vinculados con las funciones del IFAI.

El consejero Marco Antonio Baños señaló que el análisis que se realiza para la incorporación de los datos biométricos que pretende Gobernación podría ser bajo el esquema de un chip que se anexe a las nuevas credenciales. En ese chip se incluirían los datos que recabaría la dependencia federal.

Asimismo, se le propondrá –a sugerencia del consejero Benito Nacif– que en las nuevas credenciales se incorpore una leyenda donde se señale que esa es la cédula de identidad a la que se refiere la Ley General de Población y a la que está obligada a emitir la Secretaría de Gobernación. Lo anterior, a efecto de salvar, por ahora, la imposibilidad legal existente de cambiarle el nombre a la credencial de elector, porque así se establece en las normas vigentes.