Los cobros excesivos en energía eléctrica que hizo la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en su primer recibo dirigido a algunas empresas y a particulares a los que daba servicio Luz y Fuerza del Centro (LFC) antes del decreto presidencial de octubre pasado, cuando se extinguió al organismo descentralizado, han provocado una cascada de demandas de amparo.

En las tres semanas recientes, en la ciudad de México una veintena de particulares han tramitado ante jueces federales en materia administrativa juicios de garantías, en los que reclaman falta de motivación y fundamentación del recibo expedido por CFE, correspondiente al bimestre en el que LFC ya no brindó el servicio.

Empresas trasnacionales como Nissan también están en litigio contra la CFE por cobros que implican cifras exorbitantes, según consta en registros judiciales consultados ayer por La Jornada.

Por ejemplo, en el expediente 1034, tramitado en el juzgado primero de distrito de amparo y en materia administrativa con sede en Toluca, estado de México, Nissan reclamó la expedición irregular de un recibo de la CFE, ya que implica un adeudo de miles de millones de pesos, que por ningún motivo pudieron ser causa de nuestro consumo regular de energía eléctrica.

Ese juzgado admitió a trámite la demanda de la compañía automotriz y fijó para el próximo 29 de enero la audiencia constitucional a partir de la cual, una vez que las autoridades responsables hayan rendido sus informes justificados, se determinará si se concede la protección de la justicia federal a la empresa quejosa.

Otras demandas de amparo similares se tramitan en los juzgados tercero, octavo y decimoprimero de distrito en la ciudad de México.

La semana pasada Martín Esparza, líder del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), hizo públicos algunos casos de particulares que habitan en el Distrito Federal a quienes fue entregado el primer recibo expedido por la CFE, en el que incluían cobros hasta por 3 millones de pesos.

También Esparza ha documentado que parte de la facturación de la CFE implica inconsistencias en los cobros. Tal es el caso del servicio 977 761 000 415, en el que dos recibos distintos tienen el mismo periodo de facturación, del 10 de agosto al 8 de octubre de 2009. Y como ése hay decenas de casos similares.

La CFE aún no cuenta con oficinas para aclarar dudas, y en el teléfono de atención 071 tardan hasta 20 minutos en atender cada caso.

Además de los errores en la facturación de los recibos, la CFE tuvo que enfrentarse durante el pasado fin de semana a problemas en la distribución del servicio de energía eléctrica, que fue interrumpida por varias horas en la zona centro del país debido a los fuertes vientos que afectaron principalmente al Distrito Federal.