Este fin de semana hubo al menos 77 víctimas de la violencia en varias entidades, de las cuales 33 corresponden al recuento de ayer. De éstas, 22 fueron ultimadas en Chihuahua, 12 sólo en Ciudad Juárez, ocho en la capital estatal y dos aparecieron calcinadas en Nuevo Casas Grandes.

Entre los homicidios en la ciudad de Chihuahua está el de un hombre cuya cabeza fue levantada en la Plaza Mayor, junto al palacio de gobierno; las demás partes del cuerpo descuartizado fueron distribuidas en distintas áreas de la localidad.

En la misma urbe, frente al Club de Cazadores y Tiradores del estado, aparecieron los cadáveres baleados de David Carrasco López, Francisco Morales González y Eleazar Saldaña Arzate, levantados horas antes por un grupo de sicarios en la ciudad de Aldama.

En la madrugada, en Ciudad Juárez cuatro personas fueron acribilladas frente a un bar de la calle María Martínez; la tarde del sábado un hombre que caminaba por calles de la colonia Insurgentes fue baleado por hombres que al huir se toparon con una patrulla militar. En el incidente perecieron los presuntos pistoleros Ricardo Corrales y Humberto Domínguez.

En Sonora, medios locales dieron a conocer al menos cuatro asesinatos, mientras en Tijuana, Baja California, cerca de las dos de la madrugada de ayer un vehículo con dos individuos chocó en la colonia Villafontana contra una patrulla municipal; los policías, al revisarlos, descubrieron que ambos iban heridos de bala y huían de un sitio donde un sujeto fue tiroteado.

Tres personas más figuran en el recuento del domingo en la misma localidad fronteriza. En Sinaloa fueron tres las víctimas reportadas, entre ellas el policía municipal Jorge Armando Hernández Valle, de 38 años, y un presunto gatillero no identificado, quienes perecieron durante dos enfrentamientos en las afueras de la comunidad de Costa Rica, municipio de Culiacán.

El agente murió en el primer tiroteo, cuando los ocupantes de una camioneta de modelo reciente dispararon a los agentes que los detuvieron; el sicario fue abatido cuando sus cómplices volvieron al vehículo abandonado que custodiaban otros efectivos, quienes abrieron fuego para repeler a los atacantes.

Rubén Villalpando, Miroslava Breach, Antonio Heras y Javier Valdez