Demanda políticas que eliminen estigmas
Martes 29 de diciembre de 2009, p. 25
Montevideo, 28 de diciembre. Con la celebración en Argentina del primer matrimonio gay en América Latina y la legalización de esos enlaces en la ciudad de México, la comunidad homosexual cierra un año de importantes avances en su lucha por la igualdad de derechos en esta región de fuerte tradición católica.
Los argentinos Alex Freyre y José María di Bello se casaron este lunes en un registro civil de la ciudad de Ushuaia (3 mil 500 kilómetros al sur de Buenos Aires), convirtiéndose en los primeros protagonistas de una boda gay en el país y en América Latina.
Debate sobre las adopciones
La boda argentina tuvo lugar pocos días después que en la ciudad de México la Asamblea Legislativa del Distrito Federal aprobara, el 21 de diciembre, la ley que permite casarse a parejas homosexuales, medida que entrará en vigor en febrero.
Las ciudades de México y de Buenos Aires, así como dos países latinoamericanos, Uruguay y Colombia, ya permitían las uniones civiles, pero el matrimonio entre personas del mismo sexo no estaba legalizado en la región, que sí lo está en naciones europeas, Canadá y cerca de una decena de estados estadunidenses.
La controversia sobre el matrimonio homosexual –fuertemente resistido por la Iglesia católica, que lo ha tachado de inmoral
– lleva consigo un debate sobre la adopción por parejas del mismo sexo.
En México los legisladores eliminaron a último momento un artículo que impedía específicamente a las parejas homosexuales adoptar hijos.
En Uruguay, una reforma del Código de la Niñez habilitó este año la adopción por parejas homosexuales, mientras otra ley permitió el cambio de nombre y sexo registrales.
También este año el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, derogó una normativa que impedía el ingreso de homosexuales en las fuerzas armadas.
Para la ONG Colectivo Ovejas Negras, aún más importante es que el gobierno uruguayo se comprometió a implementar a partir de marzo de 2010 un plan de lucha contra el racismo y otras formas de discriminación.
No obstante, Mauricio Coitiño, integrante de la ONG, aseveró: tenemos las leyes, pero no las políticas que permitan la transformación de los estereotipos y los estigmas. Y una ley sin políticas complementarias no funciona por sí sola
.
En esa línea, Brasil lanzó en 2009 un plan de promoción de la ciudadanía y los derechos humanos de los homosexuales, bisexuales, travestis y transexuales, con 180 acciones que van desde formar a los funcionarios públicos y docentes en el respeto de la diferencia sexual hasta promover un proyecto de ley que penaliza la homofobia.
Este año se batió además el récord de desfiles gays: 189 en todo el país, en todas las ciudades de más de 200 mil habitantes.
En la actualidad hay tres demandas en la Corte Suprema brasileña: dos que piden el reconocimiento de la unión estable y otra que solicita que los travestis puedan cambiar de nombre.
En relación con otros países, en El Salvador un intento de prohibir expresamente los matrimonios entre homosexuales falló, mientras Bolivia y Ecuador incluyeron en la Constitución la prohibición de la discriminación sexual.
En Colombia la lucha jurídica apunta ahora a que las parejas del mismo sexo puedan adoptar, declaró a la Afp Germán Rincón, integrante de Colombia Diversa.
Y Cuba parece haber dejado atrás décadas de marginación a los homosexuales, ya que planea analizar la posibilidad de permitir las uniones legales y la adopción de niños.
En cambio, en Costa Rica la máxima instancia judicial rechazó un intento de legalizar las uniones de hecho entre homosexuales. Mientras, el gobierno peruano promulgó un nuevo reglamento de la policía que sanciona con severidad a los agentes homosexuales, porque afectan
la imagen de la institución.