Sustraer a la Iglesia de la controversia, objetivo del rechazo
Jueves 10 de diciembre de 2009, p. 44
El ex diputado Alfonso Suárez del Real consideró que el dictamen de la Comisión de Gobernación sobre la excomunión de Miguel Hidalgo y José María Morelos, que se rechazó ayer, tiene como objeto sustraer a la Iglesia de una controvertida situación histórica frente a la efeméride del bicentenario de la Independencia.
Resaltó que la figura de remisión extraordinaria de la censura, aplicable dentro del derecho canónico a los excomulgados ante el peligro de muerte, solamente garantiza la reconciliación personal del inculpado, pero en ningún momento lo exime de las causas que generaron su expulsión del cuerpo de la Iglesia.
Ese mecanismo, abundó, permitió que los excomulgados Hidalgo y Morelos, previa ceremonia de degradación de su rango sacerdotal, pudieran reconciliarse con su fe.
Es decir, fueron actos personales, el ejercicio de un derecho considerado para todos los pecadores en tránsito de muerte; sin embargo, ello no quiere decir que la Iglesia Católica haya exculpado o concedido el perdón de sus penas.
Explicó que Hidalgo y Morelos, entre otros insurgentes, murieron condenados y expulsados de la comunidad eclesiástica, pero que en el caso particular de los clérigos, además fueron degradados y repudiados por sus propios colegas.
Consideró saludable la postura que asumió el martes pasado el Partido Revolucionario Institucional en la Comisión de Gobernación al no respaldar el dictamen, porque se trata de un tema que requiere de un estudio profundo, plural y serio, por lo que no se puede “avalar irresponsablemente un dictamen que responde más a la soberbia que a la humildad de una institución que históricamente ha agraviado Los sentimientos de la nación en torno de la soberanía popular”.