Miércoles 9 de diciembre de 2009, p. 35
Guadalajara, Jal., 8 de diciembre. Panistas miembros de los cabildos de esta capital y de Tonalá, que en 22 días dejarán el poder al Partido Revolucionario Institucional (PRI) –al igual que en otros dos municpios de la zona conurbada, Zapopan y Tlaquepaque, mientras el Partido de la Revolución Democrática (PRD) gobernará en Tlajomulco–, dejaron en plazas de base a sus colaboradores más cercanos. En Guadalajara, el cabildo autorizó el sábado entregar 130 puestos. y en Tonalá, el alcalde Jorge Vizcarra Mayorga logró el lunes la basificación de 236 trabajadores eventuales.
De acuerdo con una lista que hicieron circular priístas de Guadalajara, entre los 130 empleados a quienes se otorgaron base se encuentran asesores de regidores como Manuel Huerta González, que gana 31 mil 856 pesos mensuales; María Teresa Llamas Méndez, que percibe 22 mil pesos al mes, y Gerardo Larios Aceves, con un sueldo de 19 mil 190 pesos.
El presidente del PAN en Jalisco, Hernán Cortés, defendió la maniobra que la mayoría blanquiazul en Guadalajara hizo el fin de semana, al señalar que la decisión no sólo fue de regidores panistas, sino de varias fracciones.
El tesorero del ayuntamiento capitalino, Armando González Cantú, consideró que las nuevas plazas afectarán el costo de la nómina a diciembre, pero no de manera cuantiosa, pues aunque los empleados recién basificados fueran supernumerarios ya recibían salario.
El domingo cientos de priístas ocuparon la tribuna del ayuntamiento durante la sesión plenaria del cabildo. Esto obligó a que el último informe del gobierno panista, que encabeza Juan Pablo de la Torre (en sustitución de Alfonso Petersen, hoy secretario de Salud estatal), cambiara de sede el lunes, de la explanada del Instituto Cabañas a la sala edilicia, para prevenir nuevas protestas.
Es para darles prestaciones
En Tonalá, Jorge Vizcarra logró que la mayoría panista aprobara que 236 trabajadores obtuvieran plazas, también con la oposición de los priístas, que gobernarán el ayuntamiento a partir del primero de enero, con Antonio Mateos al frente.
“Es para que todos los trabajadores tengan las prestaciones de ley –dijo Vizcarra–. Muchos tienen hasta 15 años de servicio. La ampliación de la plantilla busca evitar discrepancias entre los propios trabajadores”, añadió.
La nómina de Tonalá tiene 2 mil 213 trabajadores, y se calcula que costará 3 millones 276 mil pesos más al año.