Ante los insistentes señalamientos de que militantes del Partido Acción Nacional (PAN) están atrás del conflicto político que existe en Iztapalapa, tres de los mencionados se deslindaron ayer públicamente: el senador Federico Döring, la diputada federal Gabriela Cuevas y la coordinadora de la fracción panista en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Mariana Gómez del Campo.

En el Senado, Döring y Cuevas, acompañados de los diputados locales Juan Carlos Zárraga, Federico Manzo y José Rendón, quienes forman parte del grupo político del senador, en conferencia de prensa aseguraron que no tienen relación alguna con Rafael Acosta, Juanito, y que apoyarán su destitución siempre y cuando no sea la perredista Clara Brugada la que se quede al frente de la citada demarcación.

Los panistas expresaron que la única petición que hacen, tanto al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, como al PRD, es que no propongan a Brugada como jefa delegacional, una vez que remuevan a Rafael Acosta, ya que ella es parte del conflicto.

De manera casi simultánea, en la sala de prensa de la ALDF, Gómez del Campo se hizo acompañar de 10 diputados afines a ella y dejó en claro que Acción Nacional niega rotunda y tajantemente su participación en esta problemática. Nos deslindamos de cualquier actuación de militantes que, a título personal, participen con el señor Rafael Acosta.

Y remachó: en el PAN nunca apoyamos ni apoyaremos a Rafael Acosta.

Acerca de los señalamientos de la hasta ayer directora general de Desarrollo Delegacional, Liliana Rodríguez, de que Carlos Acosta, hijo de Juanito, y Alejandra Núñez obedecen sus órdenes para generar la inestabilidad en Iztapalapa, respondió: ni la conozco.

Versiones recientes señalan a Alejandra Núñez de León, actual directora general de Jurídico y Gobierno de Iztapalapa, como parte del equipo político de Döring.