Los grupos legislativos en la Cámara de Diputados, excepto el PAN, objetaron el plan de difusión de la coordinación de comunicación social, pues consideraron que el proyecto sólo busca impacto en televisión y cuidar la imagen del presidente de la mesa directiva, Francisco Ramírez Acuña.

El plan, del cual se tiene copia, no incluye la difusión de la tarea legislativa en la prensa escrita. Inclusive cuestiona el desarrollo de los medios al considerar que existe proliferación de éstos en la sala de prensa.

Al comienzo de la 61 Legislatura, la oficina de comunicación social, a cargo de Juan María Naveja, pretendió que los coordinadores de esa área en las fracciones parlamentarias aprobaran la expulsión de algunos reporteros de la sala, con el argumento de que algunos no representan a medios importantes. La medida fue rechazada.

La semana pasada, durante la presentación del programa, los diputados exigieron en la conferencia para los trabajos legislativos retirar los espots que se difunden sobre supuestos acuerdos, los cuales no existen por la divergencia de posiciones entre las bancadas, y cuestionaron que la difusión se enfoque exclusivamente a medios electrónicos.

El PRD defendió que los mensajes incluyan a ciudadanos exigiendo que no se incremente el precio de las gasolinas ni se apliquen más impuestos, mientras la mayoría en la Cámara decidió subir los tributos y el gobierno de Felipe Calderón quitará el subsidio a los combustibles a partir de 2010.

Más aún: cuestionó que el primer objetivo general de Naveja –quien ejerció la misma función con Ramírez Acuña en Gobernación– sea posicionar a la Cámara como órgano confiable y plural, de representación popular.

Los legisladores del sol azteca señalaron que dicha meta ubica a la Cámara como órgano no confiable. Además, apuntaron, ya es un órgano plural y, por tanto, de representación social.

Otro objetivo cuestionado, por enfocar la estrategia en las actividades de Ramírez Acuña, es informar del trabajo legislativo y sus distintas instancias ponderando las actividades de la Mesa Directiva en apoyo de las diversas comisiones, privilegiando la pluralidad y la composición de la Cámara.

En diferentes reuniones, los coordinadores de comunicación han cuestionado a Naveja su parcialidad en los boletines de prensa, en los cuales se ubica primero a los diputados del PAN o a Ramírez Acuña y luego al resto de los legisladores, sin atender al criterio del peso específico de las bancadas.

El proyecto también incluye suprimir la síntesis informativa que se entrega diariamente a los diputados, con el argumento de que tiene un costo anual de 10 millones 600 mil pesos y un consumo de 9 millones de hojas de papel bond al año. La intención es que los legisladores la consulten vía Internet.

La propuesta asume que en los discursos de los diputados del primero de septiembre pasado se registró una concurrencia retórica, en la que persistió la necesidad de un cambio asociado a un sentido de premura y el llamado a las soluciones o respuestas a la ciudadanía.

La proyección de la Cámara pretende reducirse a radio y televisión, con el argumento de que la oficina de Comunicación Social no cuenta con recursos, y se ha expresado a las coordinaciones de prensa de los partidos que la anterior mesa directiva, a cargo de César Duarte, no dejó recursos para cubrir los compromisos de publicidad.

La oficina que ocupará Naveja por un año insiste en que el comité de administración autorice una partida adicional, pese a que las oficinas de prensa de las bancadas saben que cuentan con fondos para cubrir deudas.

La política de comunicación de la Cámara es un desastre, confió uno de los coordinadores consultados sobre el documento.