El Grupo Santos pagó 350 millones de pesos que debía a 15 mil productores de caña de azúcar; el monto se acumuló por la suspensión de pagos desde la zafra 2007-2008, informó el dirigente de la Unión Nacional de Productores de Caña de Azúcar de la Confederación Nacional de Productores Rurales, Carlos Blackaller Ayala.

Agregó que a la zafra del periodo 2009-2010 se sumarán los ingenios San Pedro y Santa Rosalía, que fueron adquiridos por los grupos Porres y Beta San Miguel, respectivamente, aunque se estima que la producción no rebase 5.1 millones de toneladas, dependiendo del clima.

Al término de la asamblea general ordinaria, Blackaller Ayala indicó que los inventarios al cierre de la zafra 2008-2009 muestran un déficit de casi 500 mil toneladas, pero eso no implica que haya desabasto de azúcar. “De las 900 mil toneladas de cupos de importación que autorizó la Secretaría de Economía únicamente se licitaron 550 mil toneladas; hasta los primeros días de octubre habían ingresado 100 mil toneladas.

“Los cupos de importación y el aumento del uso de la fructosa preocupan a los cañeros. En el caso del edulcorante, la situación es delicada pues aunque se importa de Estados Unidos, su precio es inferior al que se ofrece en ese país, por eso consideramos que se está cayendo en dumping”, dijo en conferencia de prensa.

Antes, en la asamblea apuntó que es preocupante que la propuesta de presupuesto para el campo no considere un rubro específico para el sector cañero, el cual requiere de 3 mil 200 millones de pesos para fortalecerse y alcanzar las metas del programa nacional cañero. Sin embargo, de no aprobarse ningún recurso, los cañeros no tendrán ni el subsidio para la seguridad social.

Puntualizó que en la zafra 2008-2009 se obtuvieron 4.9 millones de toneladas de azúcar, procesadas en 54 ingenios. La producción cayó en 10.2 por ciento debido a la sequía, alto costo de los fertilizantes y falta de financiamiento. Dichos factores provocaron retroceso en la productividad, la cual fue de 64.12 toneladas de caña por hectárea y un rendimiento de 7.4 toneladas de azúcar por hectárea.

Si en la zafra del ciclo que inicia no hay una producción mayor a 5.1 millones de toneladas, nuevamente el inventario final al cierre no será óptimo y el gobierno tendrá que autorizar nuevos cupos de importación en un mercado en donde los precios están al alza.

Por el momento, dijo, se vive una situación favorable en los mercados, pero la experiencia es que en ellos prevalece la volatilidad, por lo que hay que poner mucha atención en los costos de producción y tarifas de zafra, para evitar una posible pérdida de rentabilidad.