La activista anuncia que retornará a la lucha por los presos políticos
Jueves 29 de octubre de 2009, p. 16
Ecatepec, Méx., 28 de octubre. Gloria Arenas Agís, quien permaneció poco más de 10 años presa acusada de pertenecer al Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), salió del penal de Chiconautla la noche de este miércoles.
Sin previa notificación ni documento que firmar, Arenas Agís fue liberada alrededor de las 19:30 horas y sacada por la aduana. Entre otros delitos fue acusada de terrorismo, sabotaje, homicidio, acopio de armas y daños.
La ahora ex presa política fue detenida, lo mismo que su esposo Jacobo Silva Nogales (actualmente preso en el penal de alta seguridad de Tepic, Nayarit), el 22 de octubre de 1999 en la capital de San Luis Potosí, y dos días después fue presentada en el Altiplano, donde se le acusó de unos 10 delitos. Este gobierno y este sistema injusto en el que vivimos tarde o temprano va a caer, va a caducar, y lograremos que todos los presos políticos del país salgan en libertad
, dijo Gloria Arenas al salir del reclusorio.
Señaló que todavía el martes a medianoche las autoridades del penal le advirtieron que no saldría en libertad, no obstante que esperaba recibir a su favor dos amparos promovidos en Chilpancingo, Guerrero, y en Toluca, la capital mexiquense. Yo no sabía que iba a salir, de manera sorpresiva sólo me dijeron agarra tus cosas y sal
, comentó.
Arenas Agís sostuvo que su primera acción al salir del penal será incorporarse a la lucha que mantienen diversas organizaciones sociales, por lograr la liberación de los presos políticos de México. Yo salí por el movimiento y la lucha social, y todavía hacen falta que liberen a cientos de compañeros, incluido el compañero Ignacio del Valle, además de los de Guerrero y otras partes del país
, dijo.
A su salida, Gloria Arenas fue recibida por varios de sus familiares, y después por un grupo de integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de Atenco, estado de México.
De igual manera, Arenas Agís mostró preocupación por la integridad de su marido –quien lleva la defensa jurídica de ambos– porque, advirtió que el gobierno es represor y pretenderá no dejarlo salir
.