La liquidación de Luz y Fuerza del Centro sólo puede ser anulada mediante una controversia constitucional presentada por el Congreso de la Unión; sin embargo, se requiere una mayoría de legisladores para aprobar la presentación de este recurso ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, lo cual es poco probable que suceda, por la correlación de fuerzas existente. Por tanto, el único mecanismo viable para que los trabajadores exijan su reinstalación es mediante el amparo individual.

Fuentes judiciales explicaron lo anterior y agregaron que el amparo sólo procederá si cada uno de los trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) presenta su recurso, porque si lo interpone la agrupación sindical como gremio será desechado por improcedente.

Los funcionarios recordaron que el artículo 105 constitucional precisa que sólo el Congreso de la Unión puede demandar al Ejecutivo federal por la presunta invasión de esferas, que es lo que ha argumentado el PRD, en el sentido de que el presidente Felipe Calderón emitió el acuerdo de desaparición de la empresa eléctrica sin tomar en cuenta al Legislativo.

Pero en este caso concreto se ve difícil que se conforme la mayoría legislativa necesaria para que se presente la controversia en contra del Ejecutivo federal.

En cuanto al amparo, indicaron los entrevistados, los trabajadores pueden alegar la violación de sus derechos laborales, especialmente porque la ley federal en la materia señala que un empleado puede optar por la liquidación o por la restitución, y el decreto de Calderón no prevé la opción de la reinstalación, lo que abre la puerta a que proceda el amparo de los demandantes, apuntaron.