Los de PRD y PT dicen que Calderón tolera sindicatos espurios
FSTSE y mineros demandan que el gobierno saque las manos del conflicto
en el SME
Muñoz Ledo pide la renuncia de Javier Lozano
Miércoles 7 de octubre de 2009, p. 7
Mientras legisladores del PAN defendieron la decisión de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) de negar la toma de nota a la nueva dirigencia del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), los del PRD y el PT acusaron al gobierno de Felipe Calderón Hinojosa de tolerar procesos de renovación inexistentes en sindicatos como el de los maestros y de querer fracturar el Frente contra la Reforma Laboral. El petista Porfirio Muñoz Ledo demandó incluso la renuncia del secretario del ramo, Javier Lozano.
Por otra parte, organizaciones gremiales como la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) y el sindicato minero manifestaron ayer su apoyo al SME y exigieron que el gobierno saque las manos
del conflicto intersindical que éste registra.
En la Cámara de Diputados, Francisco Hernández Juárez expresó su solidaridad con el Sindicato Mexicano de Electricistas y afirmó: Definitivamente sí hay liderazgos consentidos del gobierno y no importa su situación, muchas veces poco clara del manejo de los recursos, sobre todo del gobierno
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En conferencia de prensa, Hernández Juárez aseguró que la toma de nota se ha convertido en el garrote que usan para golpear a los sindicatos; conozco una elección de un sindicato nacional, hace cuatro meses, donde ni siquiera congreso hicieron y Lozano Alarcón le entregó la nota al nuevo secretario general
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Desde la tribuna de San Lázaro, Muñoz Ledo afirmó que el tema de hoy es el atraco estructural al SME. Y lo llamo así porque es un avance de las privatizaciones que vienen y de la flexibilización laboral que se pretende. Antes de precarizar la condición de los trabajadores han decidido precarizar a los propios sindicatos
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Denunció que la intención de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social es disminuir, eliminar la resistencia del SME para proceder a la fusión de las empresas (eléctricas) y después a su privatización, como antecedente del alza desmesurada en el costo de la electricidad
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En el Senado de la República, el perredista Tomás Torres calificó como políticamente deleznable la actitud del secretario del Trabajo, Javier Lozano, mientras que el panista Gustavo Madero demandó al dirigente de los electricistas, Martín Esparza Flores, pruebas sobre las acusaciones en torno a que César Nava habría financiado a la disidencia de ese gremio.
Consideró que tales señalamientos no son más que un recurso discursivo para tratar de generar un clima de cuestionamiento sobre la actuación de la autoridad competente. Por lo demás dijo que si hubiera algún error en la decisión tomada, será la instancia jurisdiccional la que definirá al respecto.
Francisco Labastida Ochoa, senador del PRI, expuso a su vez que la única solución válida y aceptable a esta problemática es la aplicación de la ley.
Desde la tribuna, el petista Ricardo Monreal responsabilizó a Lozano Alarcón y a su jefe político
de lo que suceda en el caso del SME, luego de señalar que no tienen temor, sensibilidad ni cuidado de lo que están generando: una gran explosión social.
A su vez, el perredista Pablo Gómez se manifestó en favor de la independencia y la libertad sindical. El secretario del Trabajo no puede ser hoy el jefe de una gestapo laboral que reconoce o no reconoce los liderazgos de los trabajadores, dijo.
Por su lado, el dirigente nacional del PRD, Jesús Ortega, cuestionó que la Secretaría del Trabajo rechazara la toma de nota de Martín Esparza como secretario general del SME, mientras asume una actitud parcial con sindicatos espurios, autoritarios, antidemocráticos, como el de los ferrocarrileros, ya no se diga el del SNTE
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