Por glorificar la pedofilia
, ONG demanda al escritor, a Mario Marín y a productoras
Memorias de mis putas tristes, dice el secretario de cultura estatal, es un canto a la vida
La coproducción España-Dinamarca se realizaría en Puebla y costaría 8 millones de dólares
Lunes 5 de octubre de 2009, p. 40
Puebla, Pue., 4 de octubre. En respuesta a la denuncia que interpondrá una agrupación civil contra el gobierno de Puebla por fomentar la pedofilia
en la película Memorias de mis putas tristes, de Gabriel García Márquez, el secretario de Cultura estatal, Alejandro Montiel Bonilla, afirmó que la acción obedece a tintes políticos
.
El funcionario dijo que la denuncia nada tiene que ver con cuestiones culturales, luego de que el fin de semana la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe dijo que procederá ante la Procuraduría General de la República (PGR) contra el escritor colombiano y Nobel de Literatura 1982; contra el gobernador Mario Marín Torres, su secretario de Finanzas, Gerardo Pérez, y los representantes legales de las empresas Femsa y Televisa, que producirían el filme.
La organización no gubernamental presidida por Teresa Ulloa dijo que daría inicio a la acción legal contra todos ellos por glorificar la pedofilia y promover la prostitución infantil y la corrupción de menores
con la hechura de la película.
En entrevista Montiel Bonilla consideró que es un tema sumamente delicado
, pues el gobierno de Puebla todavía revisa la propuesta de llevar al cine la novela de Gabo e incluso hay pláticas con la productora, pero la filmación todavía no es un hecho.
El proyecto de coproducción con España y Dinamarca costaría 8 millones de dólares y se realizaría en la capital poblana, pero no hay ningún contacto de las autoridades con el escritor colombiano, explicó el funcionario estatal, y lamentó que asuntos culturales de viable beneficio económico se mezclen con cuestiones que nada tienen que ver
.
Tal vez los inconformes “tengan información que desconocemos, pero Memorias de mis putas tristes es una novela publicada en todo el mundo, sólo censurada en Irán”, porque plantea el enamoramiento de un nonagenario y una joven de 14 años, pero los editores y la crítica la consideran un canto a la vida
, concluyó.