La Arquidiócesis de México exhortó al Congreso de la Unión a asumir sus obligaciones legislativas y exigió a los congresistas no se amparen en su fuero, que ni ellos mismos saben en qué consiste, para evadir sus responsabilidades.

En el editorial de su semanario Desde la Fe, la Iglesia católica local consideró que el inicio de una legislatura es el mejor momento para que los ciudadanos comiencen a exigir a senadores y diputados el cumplimiento de sus responsabilidades, como “análisis serios y propositivos de los informes de gobierno; estudio y mejoramiento de las propuestas presupuestales para cada año; respeto de las leyes y mejoramiento de las mismas para la expresión ciudadana.

También es el momento oportuno para exigir que los legisladores no se amparen en su fuero (que ni ellos saben en qué consiste), evadiendo así sus responsabilidades, pues el Congreso es una de las instituciones menos sujetas al control de los ciudadanos y con menos rendición de cuentas sobre sus trabajos y responsabilidades, de tal forma que pueden realizar o no su tarea sin que sea posible un reclamo efectivo, destacó.

La arquidiócesis, que encabeza el cardenal Norberto Rivera, se pronunció por fortalecer el Estado laico, sin atavismos ideológicos ni trabas partidistas, pues persisten “muchos de nuestros políticos y legisladores que se empeñan en desconocer el significado de la libertad religiosa, confundiéndola con libertad de cultos.

Nos sorprende que sean ellos los primeros en desconocer el sentido de la libertad religiosa y la realidad del Estado laico, reaccionando con intolerancia, propia de algunos activistas antirreligiosos, pero no de los garantes de la legalidad del país, agregó.

El pasado viernes, la arquidiócesis publicó en su página web un correo electrónico que circula en la red, cuyo contenido debería preocupar mucho a nuestros legisladores, pues cada vez son más los mexicanos que empiezan a tomar conciencia del despilfarro de recursos que se genera en el Congreso.

El objetivo del correo, puntualizó, es exigir un alto a la forma en que se gastan los impuestos de millones de connacionales, y manifestar la indignación por el escandaloso derroche de dinero en un país con graves niveles de pobreza.