Ginebra, 1º de octubre. El llamado Grupo Cinco más Uno (G5+1) e Irán acordaron hoy intensificar el diálogo y organizar una visita de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) en las próximas dos semanas a la nueva planta de enriquecimiento de uranio de Qom, informó el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Javier Solana, quien se declaró optimista por el resultado del encuentro.

Solana indicó que Irán y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Gran Bretaña, además de Alemania) pactaron realizar reuniones preparatorias para llevar a cabo otra negociación sobre el tema nuclear antes de que finalice octubre.

Para organizar la visita de los inspectores internacionales a la instalación nuclear en construcción en Irán, el director de la AIEA, Mohammed el Baradei, viajará el fin de semana a Teherán.

Irán, además, aceptó en principio que su uranio sea enriquecido en Rusia y Francia, países que lo regresarán en forma adecuada para su utilización en un reactor, pero no con una pureza suficiente para construir bombas nucleares.

Irán, a través de su negociador en jefe, Said Jalili, reiteró que su programa nuclear no supone una amenaza a la seguridad en Medio Oriente y la región del golfo Pérsico y, por el contrario, aseguró que la principal amenaza son los arsenales atómicos.

Por su parte, el presidente estadunidense Barack Obama calificó de constructivas las conversaciones, aunque advirtió a Teherán que la paciencia de Estados Unidos no es ilimitada.

Irán, afirmó, debe dar pasos concretos para demostrar que cumplirá con su responsabilidad con respecto su programa atómico o bien avanzaremos hacia una mayor presión.

En la sede de Naciones Unidas, el canciller iraní Manuchehr Mottak estimó que la reunión de Ginebra se desarrolló en una atmósfera constructiva, y dijo esperar que las potencias tengan la voluntad política de seguir por la vía del diálogo.