Morelia, Mich., 29 de septiembre. El presidente Felipe Calderón y el gobernador perredista de Michoacán Leonel Godoy dieron señales de reconciliación cuatro meses después de que se iniciaron sus desencuentros por los operativos de seguridad. La colaboración, señaló el Ejecutivo federal, es un imperativo político y democrático que exige anteponer el interés general a cualquier otro.

Sin aludir a los motivos que provocaron el diferendo, Godoy se refirió a los muchos problemas de la entidad, como los bombazos del 15 de septiembre de 2008, y aseguró que la crisis nos obliga a trabajar más en un contexto de coordinación y cooperación, con medidas que favorezcan a la mayoría y ayuden en el combate a la pobreza.

El 26 de mayo pasado 26 funcionarios y alcaldes de Michoacán fueron detenidos por el Ejército Mexicano y la Policía Federal, sin que el mandatario local fuera avisado, lo que provocó reproches del perredista y de otros gobernadores.

La disputa creció en julio, cuando la Procuraduría General de la República acusó a Julio César Godoy Toscano, medio hermano del mandatario michoacano, de estar involucrado con el narcotráfico, lo que lo llevó a solicitar licencia como diputado federal sin haber jurado el cargo.

El escenario del rencuentro entre panista y perredista fue el centro histórico de Morelia, durante  el inicio de la segunda etapa del Plan Luz, como se bautizó al proyecto de iluminación de monumentos, edificios y vialidades de la capital michoacana en el que ambos gobiernos han invertido 300 millones de pesos. Ahí Godoy comenzó por dar la bienvenida a Calderón a la entidad y en particular a su natal Morelia.

Juntos habían caminado hacia el estrado mientras se escuchaban gritos de ¡Felipe, Felipe! provenientes de las pocas personas que tuvieron acceso a la ceremonia. El Estado Mayor Presidencial y la policía local instrumentaron un operativo de seguridad que durante la tarde y parte de la noche impidió la libre circulación por la avenida Madero, a la altura de la Fuente de las Tarascas.

Con el argumento de que Michoacán es el principal destino cultural de México, Godoy planteó: los gobiernos estatal, municipal y municipal debemos seguir unidos, esforzándonos en la preservación de esta gran ciudad.

Sin detrimento de las entidades federativas, invitó a aprovechar las fortalezas que el pacto federal da en beneficio de sus gobernados y enumeró una lista de proyectos que se requiere poner en marcha en la entidad. La Presidencia de la República y el gobierno del estado tenemos un compromiso y un objetivo en común, que es Michoacán.

A tono con el discurso del gobernador, Calderón señaló que refrendaba su compromiso personal e institucional con el bienestar y con el progreso de los michoacanos a pesar de los problemas y las adversidades que ha vivido.

Aseguró que aún en tiempos difíciles, su gobierno ha impulsado el desarrollo de infraestructura, e insistió en que los tres órdenes de gobierno tienen la responsabilidad de entenderse.