El “círculo nacional de simpatizantes de Juanito” dijo que respetará la decisión del delegado electo, Rafael Acosta, de solicitar licencia para retirarse del cargo.

Román Díaz, presidente de la Asociación Profesional Interdisciplinaria de México (APIMAC), quien impulsó dicho movimiento y alentó al petista para que se retractara de ceder el cargo a la ex candidata del PRD, Clara Brugada, dijo que Acosta tomó esta decisión para evitar brotes de violencia y derramamiento de sangre que podrían conducir a pérdida de vidas humanas en la delegación, así como por las amenazas de muerte que recibió, pero luego dijo que el motivo principal fue su estado de salud.

En conferencia de prensa a la que convocó para anunciar que el círculo de apoyo al petista se mantendrá como espacio de gestión, Díaz –a quien Acosta ofreció la Dirección General Jurídica y de Gobierno, en lugar de a Brugada–, aseguró que su apoyo a Juanito no nació por la búsqueda de cargos públicos, sino por el bienestar de los iztapalapenses.

Insistió en que la decisión de ceder el cargo a Brugada la tomó por el bien de Iztapalapa, ante la amenaza de violencia, pero al recordarle que Juanito mencionó un afección cardiaca, dijo: es otra de las causas, se me había pasado, me consta que estuvo en un hospital de cardiología y se me había pasado señalar que ésa es la causa fundamental.