El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) advirtió que la intromisión del gobierno federal en la autonomía y vida interna del gremio pone en riesgo la continuidad de la prestación del servicio de Luz y Fuerza del Centro (LFC), porque al impedir que su dirigencia cuente con la toma de nota, la propia empresa detiene recursos y acciones pactadas entre ambas partes para su modernización y productividad.

Detalló que LFC también afecta directamente a sus usuarios, porque al retrasar la sustitución de equipo –con décadas de servicio– por uno moderno y eficiente, propicia altos cobros en sus facturaciones.

Si siguen haciendo eso, habrá un estallido social contra Luz y Fuerza, y ellos dirán: ¡ya ven, no sirve, hay que privatizarla!, y lo harán, como con Telmex. ¿Y entonces quién será el otro hombre más rico del mundo gracias a la privatización de la electricidad? –preguntó Fernando Amezcua, secretario del exterior del sindicato.

La Jornada ha solicitado a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) una postura sobre las movilizaciones y declaraciones de la dirigencia del SME, a lo cual no ha respondido.

El pasado jueves, los electricistas realizaron un mitin frente a la dependencia federal, cerrando por más de 10 horas la circulación vehicular en Periférico, para exigir la entrega de la toma de nota a Martín Esparza Flores como secretario general del SME.

Los electricistas pusieron de plazo hasta mañana para que la STPS entregue dicha nota, que hará oficial el triunfo de Esparza en las pasadas elecciones. De lo contrario –advirtieron–, la próxima semana paralizarán la ciudad para exigir que se respete la autonomía del sindicato.

El encuentro en la STPS, afirmó Fernando Amezcua, también fue para advertir a la dependencia que si el gobierno federal recorta el presupuesto, los hacemos responsables de que no exista continuidad del servicio público de energía eléctrica en las zonas que atiende la empresa en municipios de México, Hidalgo y Morelos, así como todo el Distrito Federal.

Amezcua explicó que apoyada por la STPS, la empresa se ha entrometido en la vida interna del SME al parar los trabajos de productividad pactados, con la excusa de que la representación sindical no ha presentado la toma de nota o una constancia emitida por la Dirección General del Registro de Asociaciones de la propia secretaría.

Es un trámite administrativo por el que el director de LFC (Jorge Gutiérrez Vera) nos dice que dichos proyectos están detenidos hasta que no se le dé tal o cual cosa, incluso nos lo ponen por escrito en algunos documentos. Eso es entrometerse en la vida de los sindicatos y su autonomía, aseguró.

Reiteró que en el transcurso de la mañana de este lunes, la STPS deberá entregar la toma de nota al comité ejecutivo que encabeza Martín Esparza; de lo contrario –advirtió–, la mayoría de los 66 mil agremiados activarán su fase II y se movilizarán en las entidades donde tienen presencia, en protesta por la intromisión del gobierno federal. Además ofreció una disculpa a quienes fueron afectados por el plantón del pasado jueves.