El titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Alberto Cárdenas Jiménez, declaró que si bien hay un problema de sequía que afecta a algunos estados, principalmente Aguascalientes, confió que en breve esa situación cambiará. Se espera, dijo, que en 10 o 12 semanas, como dicen los que más saben del clima a escala mundial y nacional, habrá buena agua.

En Aguascalientes se dejaron de sembrar 30 mil hectáreas y se perdieron cosechas en más 35 mil. Allí ya se inició un plan de resiembra y hasta la fecha es el estado con mayor afectación, señaló en breve entrevista luego de reunirse con integrantes de la Federación de Colegios y Asociaciones de Médicos Veterinarios.

Admitió que habrá una pérdida en la producción de alimentos, pero hasta el momento, abundó, ésta no se puede calcular con exactitud. De las 201 millones de toneladas programadas para el cierre de este año, al corte de julio ya se habían rebasado 112 millones; vienen muchos cultivos de riego, sobre todo en la última parte del año, y esperamos que no se pierdan, destacó.

Antes, en la reunión con los veterinarios, Cárdenas Jiménez aseguró que hay avances en la contratación de seguros agrícolas y pecuarios, y a la fecha se tienen cubiertas 5.4 millones de hectáreas y 4.2 millones de cabezas de ganado. Además, para elevar la calidad e inocuidad de los alimentos y los productos pesqueros se han invertido 29 mil 400 millones de pesos en el periodo 2007-2009.

Proteger el país de enfermedades que vienen de fuera e incrementar el estatus sanitario son factores fundamentales en el comercio internacional de alimentos. En el caso de México, estas acciones han permitido alcanzar un valor de exportación anual de 17 mil millones de dólares en productos agroalimentarios.

Puebla: caería entre 30 y 50% la producción de maíz

Por otra parte, organizaciones de productores y de ganaderos insistieron en la activación de un plan emergente. En Puebla se estima una caída de entre 30 y 50 por ciento de las 600 mil hectáreas destinadas a la producción de maíz, lo que dañará la economía de 300 mil productores, que tienen entre una y dos. Hace 25 años no se presentaba una sequía tan prolongada como la actual, por lo que también hay daños a cultivos de cebada, haba y frijol, aseguró la Confederación Nacional Campesina.

Federico Ovalle Vaquera, dirigente de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos, agregó que la situación se agravará por el recorte de 50 mil millones de pesos que pretende hacer el gobierno a los subsidios de los programas sociales. Los impactos de la recesión y la reducción de las remesas se sumarán a los daños por la sequía, por lo que es posible que la pobreza alimentaria al cierre del actual gobierno se ubique por encima de 62 por ciento y la pobreza de capacidades será de 96 por ciento del total de la población campesina, subrayó.

Se pierden mil 500 cabezas de ganado en BCS

En Baja California Sur, mil 500 cabezas de ganado vacuno se han perdido en las últimas semanas debido a la sequía, informó la presidenta de la Unión Ganadera Regional, Maribel Cosío Núñez. Dijo que la falta de lluvias y las políticas agropecuarias erradas, que favorecen la importación de productos cárnicos, tienen a la actividad al borde de la desaparición en el estado, lo que perjudicaría a unas 3 mil familias de productores.

Mencionó que los apoyos del gobierno para mantener el ganado en tiempos difíciles son insuficientes, mientras que la falta de lluvias incrementa al doble el precio del alimento, lo que hace inviable la manutención del hato.

En Querétaro, la sequía ha provocado que unas 700 cabezas de ganado se hayan perdido hasta el momento, señaló el presidente de la Unión Ganadera Regional, Javier Lara Pastor. Dijo que la mortandad de 700 cabezas de ganado representa 5 por ciento del total de la producción de ganado en la entidad. Sin embargo, dijo, esa situación afecta a productores de los municipios de Arroyo Seco, Landa de Matamoros y Jalpan de Serra, en la zona de la sierra Gorda del estado. Unos 3 mil ganadores se han visto afectados por la falta de agua y alimento para los animales, pues las presas se encuentran a 27 por ciento de su capacidad.

(Con información de Raymundo León y Mariana Chávez)