Mientras la Secretaría de Hacienda aplica recortes presupuestales para hacer frente al déficit fiscal del próximo año, la cantidad de recursos que el gobierno destina a financiar la burocracia electoral es un gasto excesivo si se analiza respecto de lo que se recibe en términos de democracia, sostuvo Raúl Picard del Prado, presidente de la comisión de comercio interior de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).

Picard del Prado consideró necesario reducir el costo del sistema electoral mexicano, catalogado como uno de los más onerosos a escala mundial.

El dirigente empresarial lamentó que las campañas electorales se han convertido en guerras entre los partidos, en las que los recursos económicos se invierten en tratar de denostarse mutuamente en vez de hacer propuestas concretas para buscar el voto de los ciudadanos.

Según datos proporcionados por el sector privado, del presupuesto total del Instituto Federal Electoral (IFE) para las elecciones intermedias de 2009 se destinaron 372 millones de pesos para monitorear los 23.5 millones de promocionales, que se pagaron a la empresa Grupo de Tecnología Cibernética SA de CV.

Este año, el presupuesto del instituto fue de 12 mil 880 millones de pesos, de los cuales 9 mil 150 millones fueron para gasto operativo y 3 mil 633 para prerrogativas de los partidos. Para 2010, dice, el monto que se asignará a los organismos políticos sera mayor, debido a que se incrementa en función del número de personas que estén en el padrón. De 2006 a 2009 el padrón creció en 7 millones de personas.

Este gasto que se está haciendo, para lo que estamos recibiendo, es inútil. No podemos hablar de democracia cuando el dinero que les dan a los partidos se emplea en ataques (...) nosotros los votantes no creemos en los políticos. Estamos atacando lo más preciado que tiene el país, que son sus instituciones, señaló.

Un análisis del sector empresarial indica que con los recursos empleados en las prerrogativas de los partidos, más el costo del monitoreo de los promocionales, se podría pagar el salario mínimo (54.80 pesos) a 200 mil personas durante un año, o inscribir en el seguro de desempleo al mismo número.

Con esos 4 mil 5 millones de pesos, agrega el análisis, se podrían construir 144 hospitales de especialidades, mil 200 nosocomios básicos comunitarios o 21 del tamaño del nuevo Hospital Juárez de la ciudad de México, así como dotar de 60 computadoras a 8 mil 750 escuelas o construir 450 escuelas públicas nuevas.

Sueldazos

Por otra parte, Picard del Prado calificó de exagerados los sueldos que se pagan a los consejeros electorales. En la iniciativa privada son contadísimos (los sueldos similares), y quienes ganan esas cantidades es porque generan utilidades impresionantes a los consejos de administración. Realmente son excesivos los gastos que tenemos, es un sueldo sumamente alto, sostuvo.

En febrero de este año, en plena crisis económica, los consejeros electorales propusieron aplicar una ley que homologaba sus sueldos con los de los ministros de la Suprema Corte, y que representaba un incremento de 46 por ciento en sus percepciones. El planteamiento fue ampliamente rechazado por la opinión pública y la clase política, lo que los obligó a dar marcha atrás.

Un año antes, en 2008, los consejeros ya se habían aumentado el sueldo en 20 puntos porcentuales, mientras que los incrementos para los sectores productivos y de servicios fueron de apenas 4.5 por ciento.

De acuerdo con fuentes del sector empresarial, entre las prestaciones de los consejeros electorales se encuentran: un bono matrimonial de un mes de sueldo, gratificación de fin de año, 75 días de sueldo extra cuando hay elecciones, anteojos, aparatos auditivos, vales de despensa y pagos de celular.

Este año, sostienen las fuentes, cada uno de los nueve consejeros recibió 12 mil pesos mensuales en comidas (aunque cuando hay reunión o sesión del Consejo comen en el comedor del instituto), además de que cada uno tiene derecho a un coche y a 3 mil 600 pesos mensuales para pagar su cuenta de celular, mientras que para diciembre próximo recibirán 40 días de salario como aguinaldo, sin descuento.

De acuerdo con un estudio de Fundaciones Internacionales Electorales para Sistemas, el gobierno mexicano gasta 18 veces más en el financiamiento a su sistema electoral que el promedio de los países latinoamericanos.

Según el informe (La Jornada, 19/6/09), el financiamiento implica que cada sufragio cuesta 17.24 dólares, lo que contrasta con los 41 centavos de dólar que se gastan para el mismo fin en Argentina y los 29 en Brasil, mientras que el país con el costo más elevado, sin contar a México, es Costa Rica, donde cada voto cuesta 8.58 dólares.

Finalmente Picard del Prado apuntó que mientras en Estados Unidos solamente hay dos grandes agrupaciones políticas, en México hay muchos partidos y la mayoría de ellos son de familia, que andan buscando fondos para sobrevivir o para ejercer una fuerza política y cobrarla con objeto de hacerse más ricos. No creo que el sistema que tenemos esté funcionando, puntualizó.