Domingo 16 de agosto de 2009, p. 14
Elementos de la Policía Federal (PF) detuvieron este sábado a ocho presuntos secuestradores y narcotraficantes, entre ellos Héctor Manuel Oyarzábal Hernández, líder del cártel de La Familia, quien controlaba la distribución de enervantes en los municipios de Ixtapaluca, Chalco y Ozumba, en el estado de México.
Esta detención se suma a la de al menos cinco presuntos líderes de la organización La Familia en los últimos tres meses en distintos puntos de Michoacán, Guerrero y el estado de México, luego de que en julio pasado este cártel atacó en 15 ocasiones instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública federal, al tomar venganza por la detención de Arnoldo Rueda Medina, La Minsa.
En los últimos meses han sido detenidos más de 130 miembros de esta organización, la mayor parte de ellos –70 por ciento– en Michoacán, y el resto en Morelos, estado de México, Guerrero y Guanajuato, con edades de entre 17 y 35 años, de acuerdo con informes de la SSP federal.
Este sábado la dependencia dio a conocer que agentes federales lograron aprehender a Héctor Manuel Oyarzábal Hernández, “presunto integrante de La Familia y encargado de las plazas de Ixtapaluca, Chalco, Valle de Chalco y Ozumba”.
Según el reporte oficial, la captura “se registró cuando agentes federales desplegaron un operativo en las inmediaciones de la calle Francisco I. Madero, en la colonia Casco San Juan, municipio de Chalco”.
Descripción de funciones
Oyarzábal fue detenido junto con Marco Vinicio Díaz Ramírez, quien se dedicaba a controlar y repartir semanalmente la droga en las tiendas de narcomenudeo y realizar cobros en el municipio de Chalco; Rogelio Andrés Peñaloza Solórzano suministraba estupefacientes al menudeo en la zona de Ixtapaluca; Reyes Quiroz Miranda era el encargado de ubicar puntos de venta del producto, y presionar a narcomenudistas que no trabajaran para esta organización delictiva, a efecto de obligarlos a ser parte de esta estructura criminal.
Asimismo fueron detenidos Ignacio Rodríguez Velásquez, José Camacho Solorio, Galberto Pérez Sánchez y Cristóbal Espejel Soto, quienes presuntamente también laboraban para la organización de La Familia como sicarios.
En el curso del operativo también fueron decomisadas armas largas y cortas, cartuchos y varios vehículos.