El coordinador de los senadores del Partido del Trabajo (PT), Ricardo Monreal, señaló las posturas contradictorias entre Felipe Calderón y su secretario de Hacienda, porque mientras el Ejecutivo federal sostuvo que es impensable utilizar los fondos de pensiones para apuntalar el gasto federal, Agustín Carstens recomendó bursatilizar las participaciones a estados y municipios.

La declaración de Calderón en Uruguay, un día antes, es muestra, una vez más, de un gobierno de dualidades, porque la actuación de las autoridades hacendarias va en sentido opuesto, resaltó Monreal.

Explicó que para compensar la caída de casi 30 por ciento en los recursos que el gobierno entrega a estados y municipios, la Secretaría de Hacienda les ha propuesto que bursatilicen sus participaciones federales, a fin de que obtengan más dinero a través de instrumentos de deuda en la Bolsa Mexicana de Valores.

Fondos de pensiones

Monreal agregó que tales recursos saldrían de los fondos de pensiones de los trabajadores y de las sociedades de inversión y las garantías de esta deuda que contraerán estados y municipios saldrán de las participaciones federales de los próximos años. Se estima, detalló, que el monto a bursatilizar es del orden de 30 mil millones de pesos.

Sin embargo, resaltó, el esquema parte del supuesto de que el próximo año mejorarán la recaudación fiscal y los ingresos petroleros. Es decir, parten de un supuesto de realización incierta, ya que diversas proyecciones económicas internacionales indican que habría visos de recuperación económica en México hasta 2012.

El senador petista Ricardo Monreal, en imagen de archivoFoto María Luisa Severiano

El coordinador de la bancada petista en el Senado recordó que Brasil siguió un esquema similar a finales de la década de 1990 y terminó en una crisis financiera global, conocida como efecto samba. La mayor parte de los gobiernos locales brasileños se endeudaron con fondos de pensiones de los trabajadores y de las sociedades de inversión, a grado tal que en poco tiempo entraron en una moratoria de pagos.

Las autoridades locales de Brasil que contrajeron esa deuda pública dejaron a sus sucesores una carga fiscal de tal magnitud que se vieron obligados a desconocerla, por lo que debe pensarse muy bien antes de que estados y municipios en México entren a la bursatilización que les propone Hacienda.

O, añadió, sería bueno que Calderón repitiera a Carstens sus declaraciones en Uruguay, en el sentido de que es impensable utilizar los fondos de pensiones en el gasto federal.

El ex gobernador de Zacatecas hizo notar que uno los factores que han llevado a estados y municipios a enfrentar graves problemas financieros es el gasto, más allá de sus presupuestos, en el proceso electoral reciente. Entre promesas de campaña, de más obra pública en las comunidades y el dinero que corrió por fuera y por dentro, en los pasados comicios federales, prácticamente se quedaron vacías las arcas estatales y municipales.

Y, si consideramos que el año entrante habrá elecciones locales en la mitad del país, entre ellas para renovar 10 gubernaturas, entonces tendremos claro a dónde irán a parar esos 30 mil millones de pesos de deuda pública.