Altamira, Tamps., 6 de agosto. El presidente Felipe Calderón vislumbró que pronto habrá un nuevo horizonte económico en México y recomendó unidad a los mexicanos, ya que así se podrán tomar todas las ventajas de una lenta, pero segura recuperación.

De gira por este municipio y por Reynosa, se mostró orgulloso de que se cumplieron sus augurios en torno al tiempo e impacto que tendría la crisis económica.

“Primero dije que vendría una crisis severa, pero que el punto importante no era ver qué tan grave iba a ser, sino qué tan capaces seríamos los mexicanos de enfrentar, con carácter y con determinación, la adversidad.

Después dije que estaban prontos los días para ver que lo peor de la crisis había pasado, y hoy tenemos signos incipientes, insuficientes, insisto, pero positivos, alentadores, finalmente, de que estamos poco a poco retomando el camino de la recuperación, expresó.

Protegido por un fuerte dispositivo de seguridad y junto con el gobernador priísta Eugenio Hernández, así como por el secretario de Economía, Gerardo Ruiz, Calderón puso en marcha la planta de la empresa surcoreana Posco, donde dejó como recuerdo una felicitación escrita en una lámina de acero de las que se producen aquí.

Tras hacer el recorrido por la planta, que representó 270 millones de dólares, señaló que hemos tenido una crisis muy grave, pero aseguró que no se quedaron cruzados de brazos frente a ella y estamos ya prontos a ver un nuevo panorama, un nuevo horizonte económico para México.

Reconoció que si bien la creación de 14 mil empleos en julio es insuficiente, refleja un dato positivo de recuperación económica incipiente, pero positivo.

Para ilustrar que estamos superando la crisis, Calderón mencionó también que el mercado de valores de México alcanzó esta semana el punto más alto desde agosto del año pasado.

Añadió que afortunadamente, en nuestro sector bancario ni un solo banco tuvo que requerir dinero público. Y no sólo eso, sino que a la banca de desarrollo le dimos dinero para que prestara a los pequeños y medianos empresarios o a las grandes empresas.

Fue cuando vislumbró que si los mexicanos sabemos estar unidos y tomar las decisiones que debemos tomar, nuestra economía será más fuerte y estará mejor colocada para tomar todas las ventajas de la que, aunque lenta, es una segura recuperación de la economía a nivel mundial.

Consideró que inversiones como la de esta empresa surcoreana son una muestra de la confianza que hay en México, y no simples acciones de filantropía o de caridad.

Por eso, aseguró que su gobierno está obligado a no traicionar esa confianza, a seguir fortaleciéndola, a seguir poniendo todo lo que esté de nuestra parte para que cada día vengan más y más compañías a invertir a nuestro país.

También destacó que México es el segundo productor de acero en América Latina y el 15 en el ámbito mundial, con exportaciones de más de 6 mil 800 millones de dólares, aunque admitió que la recesión económica ha afectado el crecimiento del sector.