Luego de 10 de días de negociaciones para lograr el rescate de su hijo Cristian Guevara Téllez, secuestrado el pasado 5 de junio, el empresario José Guadalupe Guevara recibió una llamada de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal para que identificara el cadáver de su vástago, quien, de acuerdo con lo que le dijeron las autoridades, fue asesinado un día después de que fue levantado en calles de la delegación Gustavo A. Madero.

En un principio, relató el señor Guevara, los plagiarios, quienes le llamaron media horas después de ocurrido el plagio, le solicitaron un millón de dólares, pero horas más tarde cambiaron la divisa por pesos, los cuales debería entregar al día siguiente para que liberaran a la víctima, pero al decirles que sólo había logrado reunir 700 mil pesos y un reloj marca Rólex, los delincuentes suspendieron la comunicación por varios días, argumentando que era muy poco dinero.

Desde un principio, el empresario interpuso una denuncia ante la PGJDF, y aunque, agregó, agentes de la policía judicial estuvieron presentes durante algunas de las llamadas que hicieron desde el teléfono celular de su hijo, cinco durante los dos primeros días del plagio, no se pudieron registrar las voces, pues las grabadoras que llevaron los policías no tenían pilas.

El viernes pasado, uno de los presuntos implicados en el caso fue aprehendido, se trata de Héctor de la Rosa Ortiz, El Pelón, a quien el empresario identifica como pareja sentimental de la ex novia de Cristian, a quien identificó como Isabel García, y de quien, presume, puso a la víctima en manos de los secuestradores, pues la muchacha ha declarado que andaba con los dos al mismo tiempo y que había comentado al hoy detenido que su hijo tenía mucho dinero.

Antes habían sido detenidas tres personas, a quienes se les encontró el teléfono de la víctima, pero los dejaron en libertad porque supuestamente el aparato sólo se lo habían encontrado y no tenían relación con el caso, aunque, aseguró el empresario, se comprobó que cuando ellos tenían el celular contestaron llamadas realizadas por el padre de Cristian.

El secuestro ocurrió en Eje Central, en la colonia Peralvillo, cuando luego de recibir una llamada Cristian salió de su negocio, un lote de vehículos con razón social Autos Polaco, sin avisar nadie a dónde se dirigía, pero apenas salió del lugar cuando fue obligado a subir a un vehículo.

Media hora más tarde recibió la primera llamada de los plagiarios para pedir el rescate. José Guadalupe Guevara interpuso de inmediato la denuncia ante la PGJDF, que inició la averiguación previa FSP/1153/09.

Sin embargo, 10 días después el cuerpo de su hijo fue abandonado en un predio ubicado en la colonia Santa Isabel Tola, estrangulado y amordazado.

Explicó que con base en declaraciones de testigos, las autoridades han establecido que el plagio fue realizado por una banda encabezada por Noé Vázquez Ibáñez, El Gordo, quien, dijo, está involucrado en el homicidio de por lo menos cinco personas.

El empresario exigió justicia a las autoridades, que agarren a todos, para que no hagan esto a nadie más, porque yo ya no puedo ser el mismo, porque no es justo que mataran a una persona que toda su vida se dedicó a trabajar, que tenía su negocio y estudiaba derecho.