Jueves 9 de julio de 2009, p. 34
Los integrantes de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión guardaron un minuto de silencio en memoria de los activistas Benjamín Le Baron y Luis Widmar, y llamaron al presidente Felipe Calderón a garantizar la seguridad en el país.
Legisladores de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT) advirtieron que dichos asesinatos revelan que México avanza hacia un Estado fallido
y acordaron solicitar a la Procuraduría General de la República que atraiga la investigación.
Diputados del los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y del PRD coincidieron en que deben atenderse los reclamos de la comunidad de Galeana, que rechaza la violencia. El perredista Javier González Garza mencionó que el diputado local de Chihuahua Víctor Quintana Silveira, quien apoya a la familia Le Baron, ha recibido amenazas.
Los legisladores solicitaron a las comisiones de derechos humanos enviar visitadores a la zona noroeste de ese estado, y al gobernador José Reyes Baeza Terrazas frenar la violencia.
El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes Fernández, dijo en Morelia, Michoacán, que esa instancia analiza atraer el caso y cuestionó la presencia del Ejército en la entidad, que prácticamente vive en estado de sitio
, lo que no ha impedido que Chihuahua ocupe el primer lugar en asesinatos del crimen organizado.
El cardenal Norberto Rivera Carrera condenó enérgicamente
el homicidio de Le Baron y Widmar, y expresó su pésame a los familiares y a la comunidad de la Iglesia de Jesuscrito de los Santos de los Últimos Días, cuyos pastores pertenecen al Consejo Interreligioso de México.
Las diferencias religiosas, agregó, no son excusa para mostrarnos indiferentes ante el horror que el crimen organizado causa en muchas poblaciones de México; los culpables de este atroz asesinato deben ser severamente castigados
.