Las elevadas proyecciones de abstencionismo que previó la presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), magistrada María del Carmen Alanís, causaron malestar en el Instituto Federal Electoral (IFE). La mayoría de los consejeros rechazó ese pronóstico y lo consideró irresponsable y agraviante cuando sólo faltan cinco días para la votación.

La declaración de Alanís se suma a las inconformidades que existen entre los consejeros contra el máximo tribunal electoral.

En este contexto, la presidenta del TEPJF hizo extensiva una invitación a los consejeros para una comida, justo el día que concluyen las campañas electorales y después de un proceso plagado de desencuentros entre ambas instancias.

Será el primer acercamiento en varios meses, durante los cuales prevalecieron criterios encontrados entre magistrados y consejeros en varios temas, como las sanciones por casi 20 millones de pesos impuestas al PVEM que fueron condonadas por los magistrados, o las multas aplicadas a las televisoras que ha regateado el tribunal electoral.

Entrevistado acerca de las previsiones de Alanís, el consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés Zurita, señaló: no sé cuál sea la base del cálculo de la magistrada; lo que sí puedo decir es que en torno a esa cifra es lo que las encuestas han dado. Es un poco prematuro posicionarse sobre ese particular. Puede ser que voten alrededor de 30 millones de ciudadanos (40 por ciento del listado nominal) que es un cálculo a la baja.

De acuerdo con Valdés, la participación de 30 millones de electores es bastante adecuada para la tradición de las elecciones intermedias en nuestro país.

No existe ninguna base científica para que Alanís realice unas proyecciones semejantes, aunque se haya basado en encuestas que indican un porcentaje de abstencionismo que, de concretarse, se ubicaría en el máximo histórico desde que se integró el IFE.

Por separado, otros consejeros externaron su rechazo a esas proyecciones y lamentaron que se difundieran en vísperas del proceso electoral.

En este contexto, estos consejeros hicieron un balance de los contenciosos más relevantes que se han presentado durante la campaña: la prohibición de los magistrados a la utilización de logos partidistas en los materiales de capacitación; la actitud de no asumir plena jurisdicción en algunos temas, y la constante devolución de expedientes relacionados con las sanciones contra empresas televisoras, entre otros.

Los consejeros mostraron especial preocupación porque en la sesión del TEPJF se obligue a realizar una nueva sesión de Consejo General, pues estas decisiones han sido constantes y han duplicado la carga de trabajo en el IFE. El acercamiento de este miércoles podría servir para reconstituir las relaciones entre ambos organismos.

En otro orden, Valdés Zurita respaldó plenamente la adopción de medidas cautelares para retirar todos los promocionales con contenido político electoral de las revistas.

El consejero Virgilio Andrade destacó que la decisión fue adoptada con el propósito de evitar que los promocionales de revistas impacten sobre la equidad de la contienda durante los tres días de veda de campañas, previa a la jornada electoral.

Andrade subrayó que, a diferencia de casos anteriores –la práctica fue utilizada especialmente por el PVEM, pero también por PSD, Nueva Alianza, PAN y hasta por el gobierno federal– esta particularidad motivó que la decisión se adoptara de forma radical.

Por otro lado, Valdés minimizó el enfrentamiento que tuvo la víspera con el consejero Marco Antonio Gómez Alcántar. Consideró que una vez que se realice el proceso electoral, las aguas volverán a su nivel. Yo respeto todas las opiniones, hago mi trabajo, vine a desempeñar una labor del Estado mexicano, aseveró.