Confía el gobernante en que los militares acatarán su mando
Miércoles 1º de julio de 2009, p. 23
Nueva York, 30 de junio. La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) condenó hoy el golpe militar del domingo en Honduras, e instó a los 192 países miembros a no reconocer otro gobierno que no sea el del presidente constitucional Manuel Zelaya,
En el texto, el organismo repudió el golpe de Estado en la república de Honduras, que ha interrumpido el orden democrático y constitucional
, y pidió la inmediata e incondicional restauración del gobierno legítimo de Zelaya y de la autoridad legalmente establecida en Honduras
.
La resolución, adoptada por aclamación, fue presentada por el bloque latinoamericano representado por Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Antigua y Barbuda, Guatemala y República Dominicana.
No obstante, fue un texto moderado con respecto a un borrador previo, lo que permitió que luego se sumaran Estados Unidos, Canadá y Colombia.
El proyecto final aprobado incluyó una enmienda en que expresa un decidido respaldo
a los esfuerzos regionales de organismos como la Organización de Estados Americanos (OEA) para resolver la crisis.
El presidente Zelaya, quien se encontraba en el recinto, denunció las condiciones en que fue expulsado de su país y agradeció el apoyo internacional.
Las resoluciones de la Asamblea General de la ONU no son legalmente vinculantes, como sí sucede con las resoluciones del Consejo de Seguridad.
No obstante, el mandatario hondureño dijo que la resolución de la Asamblea General es un reconocimiento
a la gente de Honduras y de todo el mundo que continúa luchando por los principios que defiende la Carta de la ONU, como la justicia y la libertad.
Por otra parte, Zelaya insistió en que este jueves regresará a Honduras en compañía del secretario general de la OEA y los presidentes de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y de Ecuador, Rafael Correa.
Aunque la justicia en Honduras acaba de expedir una orden de detención en su contra, Zelaya confió en que los militares golpistas acatarán su mando cuando regrese, y les pidió no reprimir a la gente. Pero a los medios de comunicación colombianos, Zelaya declaró que el narcotráfico participó en el golpe en su contra.