Vieron como pecado
mi proyecto social, dice en Managua
Martes 30 de junio de 2009, p. 20
Managua, 29 de junio. El presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya, anunció hoy aquí que estará mañana en Estados Unidos para denunciar la usurpación de poderes en su país tanto en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA).
Arropado por la condena unánime de sus colegas de América Latina al gobierno de facto encabezado por Roberto Micheletti instalado ayer en Honduras, Zelaya negó en entrevista que pretendiera su relección y previó su regreso a Tegucigalpa el jueves, una vez que concluyan sus compromisos en otros países.
La relección no existe, es falso, es lo que dice la oposición para justificar el golpe
, afirmó, para agregar que este es un argumento espúrico
para desprestigiar la encuesta que había convocado para el domingo pasado.
En el Centro de Convenciones de la capital nicaragüense, también expresó su preocupación de que este movimiento tenga un efecto multiplicador en el continente: lo que le pase a un presidente le puede pasar a otro y lo que le pase a un pueblo le puede pasar a otro
.
Consideró que detrás de este golpe de Estado está la voracidad de grupos que manejan el país, que no quieren ningún tipo de reforma, ni siquiera hacer una encuesta quieren. Imaginate que propusiera una reforma económica
.
Definió a su país como altamente conservador
y por eso se vio como un pecado
su proyecto social, porque estos grupos oligárquicos solo quieren hablar de comercio y dinero, no quieren hablar de los derechos de los pueblos.
Atribuyó la molestia de estos grupos a que él pretendía hacer una encuesta sin los políticos, sino dirigida a obreros, trabajadores, campesinos, amas de casa, indígenas.