No se libra de tener un retroceso similar al de la crisis del tequila, define Moody’s
Brasil, Perú y Chile encabezarán la recuperación de la economía latinoamericana, afirma
Viernes 26 de junio de 2009, p. 31
La economía mexicana tendrá este año la mayor contracción entre los países latinoamericanos y también será la que tarde más tiempo en salir de la recesión, en parte por fallas en el programa gubernamental de estímulo y la dependencia de Estados Unidos, advirtió este jueves la firma calificadora Moody’s, una de las tres más importantes del mundo.
“México no se libra de tener una contracción similar a la generada por la llamada crisis del tequila en 1995”, manifestó Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody’s. Destacó que Brasil, Perú y Chile encabezarán la recuperación de la economía latinoamericana, mientras México y los países de América Central serán los últimos en salir.
La región entró en recesión durante el primer trimestre de este año, cuando la mayoría de los países mostró una segunda caída consecutiva en el producto interno bruto (PIB). América Latina presentó una contracción de 3 por ciento en el primer trimestre, después de haber crecido 5.2 por ciento un año antes, de acuerdo con la firma calificadora.
Por el lado de la producción, el sector industrial resultó el más impactado por la desaceleración externa, seguido por las actividades primarias altamente ligadas a la exportación de materias primas. Al mismo tiempo, el sector servicios se debilitó y, en algunos casos, incluso se contrajo, golpeado principalmente por la desaceleración de los mercados internos, planteó un reporte de la firma.
Es obvio que los países más afectados fueron aquellos más estrechamente ligados a la economía estadunidense, como es el caso de México y los países de América Central. Por otra parte, los países con socios comerciales más diversificados, como los del Cono Sur, registraron contracciones más ligeras
, expuso Coutiño.
Primero en recesión
México fue el país que más contribuyó a la recesión en Latinoamérica, con una contracción de 8.2 por ciento el primer trimestre de 2009, con respecto al mismo periodo de 2008, principalmente como resultado de su elevada dependencia de la economía estadunidense y de su tímida y lenta sincronización monetaria con el estímulo fiscal, añadió.
Chile le siguió, aunque con una contracción cuatro veces menor, de sólo 2.1 por ciento para el primer trimestre. Por su parte, Brasil decreció 1.8 por ciento, mientras Colombia cayó 0.6 por ciento. Sólo tres países, Argentina, Perú y Venezuela registraron un desempeño positivo, aunque reportaron una desaceleración significativa.
Aunque el estímulo de política para contener la crisis llegó rezagado, su impacto comenzó a reflejarse hacia mediados del año, especialmente en países donde las acciones fiscales adoptadas por los gobiernos se concentraban tanto en el consumo como en la inversión. Es por ello que ya se observan algunas señales que apuntan a que la velocidad del descenso económico se redujo ligeramente durante el segundo trimestre de 2009 en países como Brasil, Chile y Perú, abundó.
En los primeros dos países, el gasto público considera una combinación más marcada hacia programas sociales y de infraestructura, mientras en Perú el estímulo se concentró más en la inversión en construcción. En México, por otro lado, el estímulo anunciado también se centró en la infraestructura, pero su reducida eficacia se debe más a restricciones operativas y burocráticas en la aplicación del presupuesto federal.
Coutiño expuso que los líderes de la recuperación
de la economía latinoamericana serán Brasil, cuyas exportaciones representan sólo 13 por ciento del PIB, y Perú, que ligeramente tocará territorio negativo. Aunque la economía chilena mantiene un alto nivel de dependencia de las exportaciones, que representan casi 40 por ciento de su PIB, el estímulo fiscal que aplicó (casi 3 por ciento) duplica el promedio de la región, a lo que cabe sumar que su política de relajamiento monetario ha sido la más agresiva, lo que convertirá al mercado interno en el motor principal del crecimiento chileno.
Por su parte, Colombia también saldrá de la recesión y entrará en recuperación este mismo año. Venezuela y Argentina son dos casos separados en el sentido de que sus perspectivas dependerán del manejo de sus desequilibrios macroeconómicos.
“Mientras tanto, la recesión en México se extenderá a lo largo de todo el año, y la recuperación sólo dará inicio a principios del año siguiente. México no se libra de tener una contracción similar a la generada por la llamada crisis del tequila en 1995”, planteó.
América Latina saldrá de la recesión antes del cierre de este año, y la recuperación se fortalecerá el año entrante. Los países del Cono Sur encabezarán la recuperación, mientras México y América Central quedarán rezagados. La región se contraerá 1.8 por ciento este año, con los primeros tres trimestres reportando caídas. El crecimiento regresará al cierre del año. En lo que respecta al año entrante, se prevé un aumento del crecimiento de 3.5 por ciento. La región entrará en una trayectoria de crecimiento más estable después de 2010, coincidiendo con el ciclo de recuperación global.