El primero de septiembre, el Gobierno del Distrito Federal (GDF) comenzará la construcción de un penal para reos de alta peligrosidad, con capacidad para mil 500 o máximo 2 mil delincuentes, entre secuestradores, violadores y homicidas, anunció Marcelo Ebrard, quien advirtió que pese a la oposición que pueda haber, llueva, truene o relampagué, no me voy a detener.

El mandatario capitalino eludió dar la ubicación de este centro de reclusión, ya que, anticipó, mucha gente se opondrá. Me van a querer estorbar, pero no me van a detener porque tengo que hacer esto.

–¿Será en Tláhuac?

–Luego te digo, no necesariamente, pero el primero de septiembre se empezará a construir el penal”.

Insistió en su llamado al gobierno federal para que a la brevedad inicie el traslado de los internos del fuero federal a lugares como las Islas Marías. “No pretendemos crear conflictos –aclaró–, pero mi obligación es defender mi ciudad.”

^{Reos del fuero federal, un peligro}

En un desayuno con líderes empresariales, el jefe de Gobierno remarcó que en los reclusorios de la ciudad hay 6 mil delincuentes del fuero federal, entre ellos Sandra Ávila Beltrán (la llamada Reina del Pacífico) y el jefe del cártel de Tijuana. Luego nos preguntan ¿están operando en el Distrito Federal? Pues ustedes qué creen.

“Llegó la Reina del Pacífico con todos sus contadores, asesores, hijo, amantes y todo. No queremos que estén en nuestra ciudad, no es justo, queremos que se vayan a los penales de alta seguridad”, puntualizó.

Posteriormente, en conferencia de prensa, Ebrard explicó que la manutención de los 6 mil huéspedes federales cuesta 18 millones de pesos al mes. Sin embargo, dijo que le preocupa más el riesgo que significan para la ciudad de México esos individuos aquí; no es tanto el costo, que es importante.

En alusión a la propuesta que hace un par de semanas hicieron diputados de la Asamblea Legislativa de dejar libres bajo fianza a quienes roban poco, el Ejecutivo local señaló que no está de acuerdo, se los digo con toda claridad, porque eso sería tolerar una incidencia mucho más alta en la calle.

Al cuestionar quién definiría cuál es el impacto del robo, Ebrard abundó: tú tienes 20 pesos para tu día y te los quitan, pues puede ser gravísimo.