Al menos 15 mil militares combaten a 4 mil militantes islámicos en el valle de Swat
Pide ONU a la comunidad internacional financiar gastos de ayuda a un millón 700 mil refugiados
Domingo 24 de mayo de 2009, p. 25
Islamabad, 23 de mayo. Las fuerzas armadas paquistaníes pusieron hoy en marcha una operación terrestre para recuperar el control de Mingora, la principal ciudad del valle de Swat, en el noroeste del país invadido por Estados Unidos y sus aliados, en lo que un alto jefe del ejército caracterizó como una nueva fase en la lucha del gobierno de Pakistán por restablecer la autoridad del Estado en un territorio dominado desde hace varias semanas por el talibán.
Fuentes militares dijeron que unos 15 mil militares combaten a 4 mil militantes en una región que tenía significativos ingresos por turismo, pero que desde hace dos semanas el gobierno paquistaní convirtió en un escenario de guerra, presionado por la administración demócrata de Estados Unidos, que considera el valle de Swat como un refugio de los talibanes afganos y las milicias de Al Qaeda, la red de Osama Bin Laden, a los que pretende derrrotar desde hace siete años y medio en el vecino Afganistán.
“Hoy es la fase más importante de la operación Rah-e-Fast, el despeje de Mingora ha comenzado”, afirmó el teniente general paquistaní Athar Abbas a los medios de comunicación.
Mingora tenía antes del estallido del conflicto una población de alrededor de 300 mil personas, pero casi todas ellas han huido junto con los habitantes de otras localidades del valle de Swat, que sorpresivamente quedaron en el centro de la tormenta.
El avance del ejército en Mingora se desarrollo lentamente debido a la resistencia de los milicianos talibanes calle por calle, según reportes oficiales militares y de la prensa regional.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa de Pakistán afirmó que ha abatido en las últimas 24 horas a 17 milicianos talibanes, uno de los cuales fue identificado como el mullah Maulana Fazlullah, uno de los líderes locales de la organización islámica, que estableció sus primeros enclaves paquistaníes en los años 80.
Para tratar de desalojar a los combatientes islámicos, las fuerzas armadas recurrieron al fuego de la artillería pesada y a disparos de la aviación, que apoyaron el desplazamiento de la infantería hacia el enclave rebelde.
Según el sitio en Internet de la televisora árabe Al Jazeera, circulan versiones en la zona de guerra respecto de la existencia de túneles que la guerrilla talibán construyó en espera de la llegada de las fuerzas armadas gubernamentales, para enfrentarlas con éxito.
Sin embargo, la emisora de televisión dijo que el mando militar paquistaní prevé que en un plazo de 34 a 48 horas tendrá el control total de Mingora.
Esa ciudad fue rodeada por las cuatro direcciones
para cortar las vías de suministro de provisiones a los combatientes del talibán, que impusieron la Sharia –ley basada en principios islámicos– a la población del valle de Swat.
Mueren mil 100 milicianos
Las fuerzas armadas de Pakistán y reportes de la prensa señalan que alrededor de mil 100 milicianos han muerto en dos semanas en la provincia Frontera Noroeste, donde han caído 50 soldados.
La situación bélica en la región ocasionó la migración forzosa de un millón 700 mil antiguos residentes del valle de Swat y del resto de la provincia noroccidental, y en consecuencia Naciones Unidas hizo un llamado a la comunidad internacional para financiar los gastos de ayuda del orden de 543 millones de dólares.
Pakistán tiene unos 172 millones de habitantes y la nación asiática es poseedora de armamento nuclear, lo que según los medios de prensa estadunidenses estaba en riesgo de caer en poder de los insurgentes por la proximidad del avance de las milicias talibanes.
Según el primer ministro Yousaf Raza Gilani, la presión ejercida por las tropas gubernamentales en el valle de Swat y sus alrededores podría generar acciones de reacción
del talibán en cualquier parte del país
, pero justificó la operación militar con el argumento de que los terroristas no pueden tomarnos como rehenes
.
Dimos la orden para esta operación donde la autoridad ha sido desafiada y cuando se había establecido ya un gobierno paralelo
, dijo el jefe de gobierno.
“La operación militar –sostuvo por su parte el presidente Asif Ali Zardari al hablar con legisladores que representan a la región del valle de Swat– fue adoptada por el alto mando castrense como último recurso contra militantes y extremistas que retaron al Estado”.