El juzgado decimocuarto de distrito en materia de procesos penales federales determinó efectuar la segunda semana de mayo una junta de peritos, a fin de que la autoridad judicial pueda determinar si autoridades de Estados Unidos y la Procuraduría General de la República (PGR) confundieron al presunto capo del cártel de Tijuana, Eduardo Arellano Félix, con su hermano Ramón, este último muerto durante una balacera hace siete anos en Mazatlán, Sinaloa. Eduardo, apodado El Doctor, se encuentra en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en espera de que el juzgado decimocuarto emita una opinión jurídica respecto de si procede su extradición a Estados Unidos. Sin embargo, el médico Hugo Chávez, contratado por El Doctor, presentó hace tres meses un dictamen apoyado con pruebas documentales, en el que afirmó que las autoridades estadunidenses se equivocaron y enviaron fotografías de Ramón en lugar de su hermano Eduardo. La ley de extradición internacional impide el envío de un detenido cuando no está plenamente comprobada su identidad. El juzgado solicitó a la PGR que nombre un perito para que dé su propio dictamen. Ambos especialistas se verán las caras dentro de dos semanas y ofrecerán sus argumentos técnicos.