Guadalajara, Jal., 24 de abril. El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI informó que Francisco Javier Guízar Macías renunció a la presidencia del Comité Directivo Estatal (CDE) del tricolor, lo que pondría fin a la crisis interna que comenzó el 15 de abril cuando un grupo de candidatos a presidencias municipales encabezaron la toma del edificio central del partido en Jalisco, inconformes con la lista de regidores que a escondidas Guízar palomeó y registró ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del estado de Jalisco.

El CEN del PRI, que encabeza Beatriz Paredes Rangel, recibió y aceptó la renuncia que presentó el ingeniero Francisco Javier Guizar Macías al cargo de presidente del CDE del PRI en Jalisco a partir de esta fecha, señala un comunicado de prensa de la dirigencia.

Explica que Guízar renunció para contribuir a restablecer la unidad en el priísmo jalisciense, que debe prevalecer con el objetivo de enfrentar el reto electoral del 5 de julio del 2009, toda vez que unidos, saldremos victoriosos.

La decisión de dejar ese cargo se dio cuando, reunido con Beatriz Paredes Rangel en la ciudad de México, Guízar Macías fue enterado que una parte muy representativa de liderazgos del PRI Jalisco acordó hacer un pedimento conjunto al CEN para su salida.

La destitución fue exigida a la líder nacional en forma conjunta por los dirigentes estatales de las confederaciones de Trabajadores de México, Revolucionaria de Obreros y Campesinos y Revolucionaria de Obreros de México, además de Javier Santillán Ocegueda, Manuel Bañuelos Guardado y Rafael Correa Ceceña, ex presidentes del PRI en Jalisco, entre otros militantes.

La entrega del edificio por los inconformes se realizará el domingo en una ceremonia que servirá para que los priístas y candidatos a todos los cargos de elección popular en la entidad realicen un mitin de unidad.

También se presentará al delegado que el CEN nombre para que quede a cargo de la coordinación de las campañas y candidaturas, quien estará en el cargo hasta pasadas las elecciones.

Según los estatutos priístas, en caso de ausencia del presidente estatal, el secretario general debe quedar como presidente interino. En este caso Patricia Retamoza Vega, quien regresó al cargo luego que los primeros en dejar sus cargos a partir de la crisis partidista fueron hasta el viernes de la semana pasada el secretario general electo, José Manuel Carillo, y el representante electoral José Luis Monterde.

Retamoza Vega, titular del sindicato de trabajadores académicos de la Universidad de Guadalajara, pertenece también al grupo político que dirige Raúl Padilla López, quien también tiene fuerte ascendencia en el PRD, lo que reposiciona hasta la cúspide al grupo Universidad dentro del PRI.