Impulsar una agenda legislativa que defienda los derechos de la comunidad Lesbiana, Gay, Bisexual y Trans –trasvesti, transexual, transgénero– (LGBT), no es fácil, pues no sólo consiste en modificar leyes, sino en una batalla para que el conjunto de la sociedad los reconozca.

Jaime López Vela, fundador de Modiser (Movimiento por la Diversidad Sexual en Resistencia) –dentro del movimiento de resistencia civil pacífica que encabeza Andrés Manuel López Obrador–, y quien es candidato a diputado local del Partido del Trabajo (PT) por el distrito 38 de Tlalpan, advierte, además, que el tema es reciente y tampoco hemos estado allí para exigir; eso es lo que ahora ha cambiado.

Abrir las candidaturas de los partidos políticos a personas externas que representen a la comunidad LGBT también es reciente. Refiere que el primero que lo hizo fue el PRD, que esta vez lleva a Enoé Uranga en su lista plurinominal para la Cámara de Diputados; el Socialdemócrata (PSD), que tiene el tema como una de sus principales banderas y recientemente lo hicieron Convergencia y el PT, este último, con el que buscará llegar a la Asamblea Legislativa (ALDF).

López Vela advierte, sin embargo, que como candidato del PT, su agenda no se centrará exclusivamente en los derechos de la comunidad LGBT, sino en los preceptos del proyecto alternativo de nación que impulsa López Obrador y a cuyo movimiento se ha vinculado desde la época del desafuero, junto con la actriz Jesusa Rodríguez, donde ha trabajado más.

Hoy, la resistencia civil pacífica de AMLO es el movimiento social más importante en la vida moderna de este país, asegura, por lo que antepone en el orden de su agenda la reivindicación del proyecto alternativo de nación, que desde el órgano legislativo local podría reflejarse en iniciativas como la revocación de mandato de todo representante popular; otra prioridad en su agenda será trabajar para la comunidad de su distrito y un tercero, lograr la igualdad de los derechos de la comunidad LGBT.

Sobre esta última plantea temas como el matrimonio homosexual y su reconocimiento como familia; una reforma penal que tipifique los crímenes de odio; incluir en el proyecto de constitución local la no discriminación por orientación sexual e identidad de género; el tema de la equidad de género –que es donde observó que hay más avances en materia legislativa y en políticas públicas–; instituir la educación de la sexualidad integral, que consideró uno de los más importantes para revertir el estigma de la discriminación, la homofobia y promover una cultura que valore la diversidad.

Con esto se busca que se normalice nuestra situación en la sociedad. Cuando los demás se den cuenta que los gays no somos esos personajes estrambóticos, alocados, amanerados que muestra la tele, sino que podemos ser tu primo, tu hermano, tu vecino, tu jefe y que nos vean como uno más.