Integrantes de la Asamblea Popular Ciudadana de Azcapotzalco recibieron ayer por la noche el estudio de impacto ambiental que Petróleos Mexicanos (Pemex) elaboró con motivo de los trabajos de remediación que se realizan en las instalaciones de la ex refinería 18 de Marzo.

Los vecinos indicaron que analizarán el documento y luego harán un pronunciamiento al respecto. Esta vez la reunión se realizó en el asta bandera de la colonia Plenitud.

El lunes pasado los inconformes entregaron a las autoridades, tanto federales como locales, su pliego petitorio. El documento, que cuenta con siete puntos, exige, entre otras cosas, se les informe las bases científicas en las que se basan las obras de saneamiento; la instalación de sistemas de monitoreo atmosférico modernos y factibles que permitan conocer las características de los gases que se emitan, y la aplicación de estudios médicos exhaustivos a las 50 personas, entre ancianos niños y adultos, que han presentado trastornos en su organismo.

Por su parte, la delegación Azcapotzalco emitió ayer un boletín para informar sobre la mesa de trabajo que vecinos y autoridades mantuvieron el lunes por la noche en la videoteca Manuel Álvarez Bravo de dicha demarcación.

La jefatura delegacional difundió que en la reunión los representantes de Pemex fueron fuertemente criticados y que el grupo de empleados que envió la paraestatal, coordinado por Ignacio Octavio Gálvez Medrano, en su oportunidad, aceptó su responsabilidad.

Las autoridades federales, abunda el comunicado, se comprometieron a dar respuesta a este asunto, y señalaron: nosotros lo contaminamos y nos corresponde remediar esta problemática.

Respecto de la reunión del lunes, los vecinos dijeron que por parte de la Semarnat acudió Janet Manzo; por el gobierno capitalino, Pedro Bello, y por el área de Protección Civil de la demarcación estuvo Adrián Estévez, entre otros servidores públicos.

Abandonan casas

Algunos de los afectados de las colonias Plenitud, San Pedro Jalpa, Providencia, Santa Lucía y Santiago Ahuizotla decidieron abandonar sus casas mientras pasaba el riesgo, pues el olor a gas iba en aumento.

Magdalena Juárez, de la colonia Plenitud, señaló que desde hace ocho días dejó su casa, junto con su esposo y dos hijos, pues empezaron con irritación en garganta y ojos, y el olor a gas era insoportable.