Buenos Aires, 19 de abril. El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, exigió la democratización del Fondo Monetario Internacional (FMI) y criticó el monitoreo de la entidad a las economías de países deudores, en una entrevista publicada este domingo por el diario La Nación. El fondo puede ser democratizado si el conjunto de los países que son parte de él tienen la posibilidad real de tomar decisiones con igualdad de responsabilidad, señaló.

Lo que queremos es un FMI donde uno pone más dinero porque tiene más, pero a la hora de decidir tiene que ser una determinación colectiva, teniendo en consideración lo que es mejor para todos, explicó en el reportaje realizado en Brasilia, antes de la Cumbre de las Américas.

Los países emergentes no queremos que exista una delegación del FMI para chequear las cuentas de Argentina, de Brasil o de Venezuela. No queremos más eso. Tomamos un préstamo, tenemos un plazo para pagar y respetamos las tasas de interés, pero no queremos misiones de monitoreo, insistió. Países como China, India, Brasil y Argentina tienen más oportunidades para salir de la crisis, siempre y cuando hagamos las cosas correctamente, continuó Lula. Sin embargo, matizó que para que nosotros salgamos de la crisis es necesario que por lo menos en los países ricos la crisis pare.

Durante la entrevista con el diario argentino, Lula da Silva precisó que la crisis global es una oportunidad para construir un nuevo orden económico con mayor inclusión social, más respeto por cuestiones climáticas y con más justicia social.

Las condiciones están dadas para que podamos discutir temas que hasta hace poco estaban prohibidos, señaló el mandatario: Si actuamos con prudencia, con mucha madurez, podremos construir ese nuevo orden económico. Lula recordó que al participar en la cumbre del G-20 comprendió que las certezas de los últimos 20 años simplemente desaparecieron.