Detroit, 17 de abril. El presidente ejecutivo de General Motors (GM) dijo este viernes que la automotriz aún puede restructurarse sin recurrir al tribunal de quiebras, pero advirtió que ahora es más probable que necesite protección por bancarrota para completar ese proceso.

Fritz Henderson aseguró que la automotriz no ha enfrentado presiones para tomar alguna decisión en ese aspecto por parte del panel especial designado por el gobierno para la industria automotriz.

Henderson dijo que General Motors necesitará 5 mil millones de dólares en ayuda adicional del Estado pronto y adelantó que se prevé continuar reduciendo la capacidad del gigante automotor en crisis.

Esperamos necesitar pronto cerca de 5 mil millones de dólares de financiamiento gubernamental, aunque agregó que es prematuro decir si se ha aprobado financiamiento adicional.

Según información de la prensa, el gobierno estadunidense estaría dispuesto a acordar una ayuda suplementaria de corto plazo por 5 mil millones de dólares a GM, así como 500 millones adicionales a su competidor Chrysler.

Según el periódico Detroit News (Michigan, norte), que cita a un funcionario gubernamental cercano al tema, el gobierno haría un anuncio en ese sentido la semana próxima.

La Casa Blanca aún no decide

Consultado por el diario, un portavoz de la Casa Blanca aseguró el jueves que no se ha tomado ninguna decisión sobre el monto de los fondos que recibirían GM y Chrysler.

GM aún prefiere una restructuración sin quiebra, pero estaría lista para pedir la protección de sus acreedores de ser necesario, acotó Henderson.

El ejecutivo añadió que la compañía todavía planea conservar sus cuatro marcas principales, Chevrolet, Cadillac, Buick y GMC, pero que está examinando todos los elementos de su estrategia de marcas.

Henderson calificó de especulación aquellos reportes que dijeron que iba a abandonar a una de estas cuatro marcas.

En una conferencia telefónica –la primera de varias, según dijo–, Henderson comentó que el trabajo de GM con el Tesoro ha sido como el proceso de auditoría de una inversión privada.

GM ha operado con préstamos del gobierno, pero en marzo fue instado por el panel especial a restructurar la firma, para que el Estado siga la ayuda.

Si la empresa no concluye su remodelación, mediante reducciones de deuda, recortes de costos laborales y la refinanciación de un fondo sindical de salud, podría ser forzada a caer en bancarrota.