Pumas no desea ser un escalón para que Puebla evite el descenso, señaló ayer Ismael Íñiguez: Queremos ganar, seguir sumando. Vamos a estar en casa y queremos dar satisfacciones a nuestra gente.

La empresa de mañana en el estadio México 68 no será fácil para los auriazules, reconoció el Cachas: Nosotros estuvimos en una situación así (peleando por no descender) hace unos años y es cuando sales muy prendido a la cancha, queriendo ganar y por cualquier medio salvarte.

Además, Puebla ha sido un equipo que no ha cambiado su estilo desde el inicio del torneo; ha luchado en cada juego y eso lo hace peligroso. Siento que en los duelos que no ha podido sumar, al rival le ha sido difícil ganarle.

Continuar con un buen futbol y sumando puntos cada semana es lo único que interesa a los del Pedregal, según Íñiguez, quien dijo que si hacen bien su trabajo y eso reditúa en llegar al sitio de privilegio en el torneo, bienvenido, pero no estamos obsesionados con el superliderato.

David Toledo, quien también atendió a los representantes de los medios de comunicación tras concluir el entrenamiento de ayer en el estadio Olímpico, rubricó lo que dijo su compañero:

El equipo está en buena posición (cuarto lugar). Todavía faltan cinco partidos y si nos alcanza para llegar a ese primer lugar, qué bueno.

Tampoco espera que los de la franja den otro paso hacia su salvación en Ciudad Universitaria. Recordó que la semana anterior no permitieron que Cruz Azul saliera del bache en que se encuentra y este domingo confía en que también saldrán airosos.

Reconoció que Puebla tiene un buen entrenador, que los motiva bastante, pero Pumas debe hacer lo de partidos anteriores para seguir manteniendo la regularidad que lleva hasta ahora.

Espera que los Camoteros vengan a buscar el resultado por la situación comprometida en la que se encuentran y éste sea un juego agradable para los aficionados.