El presidente de la Cámara de Diputados, César Duarte, acusó al titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Alberto Cárdenas Jiménez, de no haberse dado cuenta que estamos en una crisis económica y es necesario echar a andar otra estrategia para reactivar el campo.

Para el legislador priísta, la gente del campo está desesperada ante la errónea política agropecuaria que se aplica en el país: Por el lado oficial, desgraciadamente la Sagarpa no ha sido capaz de conducir de manera adecuada el presupuesto y le ha dado un viso equivocado, una orientación distinta al Presupuesto de Egresos de la Federación.

El legislador del tricolor refirió que la devaluación del peso impactará el precio de la canasta básica y de los alimentos en general. Ése es uno de los grandísimos problemas, el golpe a la economía, aunado a una mala política que no ha permitido el crecimiento de la producción nacional; solamente la anuncian de manera maquillada.

En tanto, el secretario de la Comisión de Transportes del órgano legislativo, Fernando Caballero, llamó la atención en torno a la incapacidad gubernamental para atender el grave problema alimentario que se registra en todas las regiones del país. Esto, dijo, se observa en el incremento exponencial de robos a contenedores de ferrocarril cargados de alimentos.

Alberto Cárdenas Jiménez. Imagen de archivoFoto Cristina Rodríguez

Y es que el robo de maíz en trenes de carga creció de tal forma que en el año 2008 el promedio mensual fue de 35 toneladas, y tan sólo en enero pasado fueron hurtadas 700 toneladas de granos y alimentos básicos.

A tal práctica se suma la intervención de la delincuencia organizada en aquellas rutas donde operan filiales de empresas estadunidenses, como la que cubre la costa del Pacífico desde el estado de Sinaloa hasta el de Hidalgo y el Valle de México, de Veracruz a Perote, así como las de Celaya, Irapuato, Guanajuato y Guadalajara.

Existe reincidencia de parte de quienes realizan dichas conductas; hay indicios del surgimiento de la delincuencia organizada. Ésta empieza a traficar con la mercancía robada de los trenes y se escuda en la manipulación de niños y mujeres para dar la imagen de causas sociales, lo que se convierte en una nueva vertiente delictiva.