La red de Bin Laden, amenaza real en países de Occidente, afirma
Viernes 27 de marzo de 2009, p. 30
Madrid, 26 de marzo. “En seis meses, incluso menos, el poder de los talibán, amparados por los extremistas de Al Qaeda, puede llegar hasta las puertas de Islamabad y amenazar con controlar el poder central de Pakistán, un país –recuerdo- que tiene armas nucleares”, señaló Ahmed Rashid, el intelectual paquistaní que mejor conoce al movimiento radical. Una de las conclusiones de este observador de una de las zonas más conflictivas del mundo es que a raíz de la guerra de Irak, ese gran error de la administración (de George W.) Bush
, el poder de la red de Osama Bin Laden ha crecido y se ha convertido en pocos años en una amenaza real en todos los países occidentales
.
Rashid presentó en Madrid su último libro, con el elocuente título de Descenso al caos (Editorial Península), en el que el autor disecciona en 600 páginas la escalada bélica estadunidense en Afganistán y señala de las amenazas latentes -sobre todo el aumento del poder talibán en la región- y las acciones apremiantes para el presidente Barak Obama.
El intelectual paquistaní se convirtió en una referencia mundial tras los atentado del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington, cuando todo el mundo puso la vista en Afganistán, gobernado por integristas musulmanes que impusieron el régimen de la sharia (ley islámica), que además cobijaron a Al Qaeda. Rashid había publicado un libro, Los talibanes, en el que advertía de este amasiato peligroso para Occidente.
En el año 2001, los talibanes eran un fenómeno afgano. Hoy en día tenemos talibanes paquistaníes, de Asia Central y mañana puede darse el caso que tengamos talibanes indios. Así que se han convertido en un modelo a seguir por todos los extremistas de la región y del resto del mundo. Es una situación muy peligrosa que afecta a Europa y a Estados Unidos, sobre todo, pues hay que recordar que en el año 2001 muy pocos países tenían células de Al Qaeda, mientras que hoy todos y cada uno de los países que forman Europa occidental las tienen. Por todo ello podemos decir que Al Qaeda no sólo no ha sido destruida, sino que se está expandiendo en Europa, en África del norte y, por supuesto, en Estados Unidos
, explicó Rashid.
También advierte de riesgos regionales inminentes. Cada vez hay un mayor caos tanto en Afganistán como en Pakistán. Pero creo que Afganistán es un país que todavía se puede ganar. Hay una larga lista de errores políticos que la administración Bush realizó. Sin embargo, creo que los problemas en Pakistán son mucho más graves y posiblemente mucho más peligrosos. Desde luego no hay soluciones fáciles para Pakistán, ya que tenemos un liderazgo político muy fragmentado, un ejército poderoso que tiene una larga historia de apoyo a los extremistas y además se trata de un país que tiene armas nucleares y un conflicto con India
, advirtió.
A juicio de Rashid, tanto la comunidad internacional como la nueva administración de Estados Unidos deben asumir que la situación regional se solucionará sólo de forma conjunta. Es decir, incluyendo a potencias vecinas como Rusia, China e India. Por eso -dice Rashid- creo que dialogar y negociar con el talibán debe ser parte de la nueva política de Obama. En Afganistán o en Pakistán. No es una cuestión de ceder en temas como derechos humanos, la Constitución, el sistema legal o este tipo de cosas. Hemos visto como (el presidente afgano Hamid) Karzai hablando con los talibanes ha conseguido llevarse a sus filas a más de seis mil, así que creo que esta puede ser una vía a explorar y profundizar
.
Rashid frunce el ceño con preocupación cuando piensa en el futuro inmediato de la región, con un panorama que documenta en el libro con numerosas referencias, entrevistas y consultas a documentos reservados. Hasta se atreve a vaticinar que es posible que los talibán emprendan la conquista del país desde su feudo actual, Swat, donde rige de nuevo la sharia. Pero la pregunta es ¿tenemos el tiempo para arreglar los desajustes? ¿Cuánto tiempo nos queda hasta que los talibanes empiecen a acercarse a Islamabad? Y si empiezan a acercarse, ¿estamos dispuestos a enfrentarnos a ellos?
Rashid tiene claro el origen del aumento de la popularidad de los talibanes en el mundo y del fracaso de la intervención en Afganistán tras los atentados del 11-S: El error estratégico del presidente Bush fue la guerra de Irak, que fue adonde finalmente fueron a parar los recursos y lo necesario para pacificar Asia central. La invasión de Irak ha sido un gran error, pues significó interrumpir la auténtica guerra contra el terror en Afganistán y Pakistán. ¡Irak nunca fue una amenaza global! ¡Irak no estaba explotando bombas en Nueva York ni había Al Qaeda en Irak antes del 2003! Y ahora sabemos que todas las razones de la administración de Bush eran mentiras deliberadas. Así que se metieron en una guerra a base de mentiras deliberadas, invadieron otro país, incluyeron al mundo árabe y descuidaron la auténtica fuente de suicidas
, concluyó.