El precio de la tortilla se estabilizará en 9.50 pesos por kilo en la mayoría de las regiones del país, pero podrá mantenerse en 8.50 pesos en aquellos lugares donde existe mayor competencia, como el Distrito Federal y la zona conurbada, según los acuerdos a los que llegaron organizaciones de molineros y tortillerías con la Secretaría de Economía (SE) y con los que se pretende descartar un alza de hasta 12 pesos por kilo, como advirtieron algunos dirigentes del sector.

Así lo informó Antonio de la Torre, dirigente de la Unión Nacional de Industriales de la Masa y la Tortilla (UNIMT), quien en estas últimas semanas encabezó una comisión de interlocución con la dependencia, en representación de grupos de molineros de diversos estados, para lograr un apoyo económico similar al que se otorgó a las grandes compañías harineras hace dos años, cuando el alimento subió de precio en 40 por ciento para fijarse en 8.50 pesos por kilo.

Dijo que la dependencia publicará en abril el acuerdo con el cual se compromete a erogar alrededor de mil millones de pesos por mes, vigente hasta julio próximo y con carácter retroactivo a enero, para apoyar a los pequeños molineros. El apoyo individual será de entre 500 y 600 pesos mensuales a los pequeños molineros o bien de 945 pesos o mil 130 pesos por tonelada de maíz producida en masa, ya que se pretende apoyar en total con mil 200 toneladas al mes.

Informó que aunque haya organizaciones que no participaron en las negociaciones recientes, podrán acceder a los beneficios pactados con SE siempre y cuando cumplan con los requisitos establecidos, como la comprobación de gastos e insumos, con los que además se pretende regularizar al sector y evitar la informalidad en la producción de masa y tortilla.

Si bien De la Torre admitió que en los meses recientes el precio de la tortilla volvió a dispararse hasta 12 pesos por kilo, sobre todo por la amenaza de las grandes empresas de encarecer la harina de maíz, dijo que con el compromiso obtenido de la SE de brindarles un apoyo económico, el precio del alimento se generalizará en 9.50 pesos en la mayoría de las regiones del país.

Es decir, un aumento de un peso más respecto de los 8.50 por kilo fijados cuando estalló la llamada crisis de la tortilla en enero de 2007, pero que según De la Torre ya se había dado de manera paulatina. Así que ponderó que lo importante es que el precio no supere ahora los 9.50 pesos por kilo para la mayoría de las regiones del país, salvo en aquellas ciudades donde siempre se ha comercializado más caro, como son los casos de Saltillo y Cancún.