Encuentran arsenal tras ataque a dos policías en Guadalajara
Domingo 15 de marzo de 2009, p. 5
Al menos 17 personas perdieron la vida en siete entidades de la República en actos de violencia imputados al crimen organizado. Entre las víctimas figura Dimas Arzeta Cisneros, ex alcalde priísta de Tecpan de Galeana, Guerrero.
En Huetamo, Michoacán, dos individuos murieron y otro resultó lesionado en un enfrentamiento que se suscitó cuando cuatro pistoleros vestidos de policías llegaron a la colonia Benito Juárez y dispararon a dos personas, una de las cuales murió pero la otra respondió el fuego matando a uno de los atacantes.
En la plaza pública de Tzitzio, otro comando mató a tiros a un hombre que caminaba con su hermana de 13 años, la cual resultó gravemente herida; y en una ranchería del municipio de Ario de Rosales el perro de un lugareño descubrió un cráneo humano entre matorrales.
Las víctimas en Guerrero fueron cinco, entre ellas el ex alcalde priísta de Tecpan de Galeana, Dimas Arzeta Cisneros –interino de 1987 a 1989– que se hallaba en su negocio cuando dos individuos a bordo de un auto Jetta lo ejecutaron con rifles AK-47 y AR-15.
De madrugada en el municipio de Zumpango, a 10 kilómetros de Chilpancingo, otra persona fue abatida a tiros y uno de sus atacantes detenido; mientras en San Jeronimito, Petatlán, pereció un ex policía municipal cuando sus atacantes le dispararon 17 balazos.
La cuarta víctima fue un joven levantado el 7 de marzo, cuyo cadáver se localizó atado de pies y manos en la carretera a México, cerca de la capital guerrerense; y en Acapulco una osamenta calcinada se localizó en una colonia de la periferia. Además, las autoridades informaron que Miguel Becerril Ramírez, coordinador de grupo de la policía ministerial, lleva un mes desaparecido.
En Sinaloa, tres miembros de una familia –incluida la madre– fueron asesinados a balazos en su casa de la colonia Las Cucas, en el norte de Culiacán. Según testigos, un desconocido llegó a cobrarles dinero y luego les disparó a corta distancia.
En Cuautitlán Izcalli, estado de México, Benjamín Armando Olvera Urgate, de 35 años y vecino de la colonia Pensil del Distrito Federal, fue abatido a tiros tras jugar futbol en canchas del pueblo Santa Bárbara, por 12 sujetos que le hablaron por su nombre. En el municipio de Melchor Ocampo, además, apareció sin vida el cuerpo de otro hombre baleado.
En ejecuciones por separado, un hombre pereció cerca de San Miguel de Villalobos, Guanajuato. Otro en la comunidad La Victoria, municipio de Hermosillo, Sonora; y uno más en Santiago Papasquiaro, Durango. Los tres cadáveres presentaban heridas de bala.
En Guadalajara, Jalisco, dos policías municipales fueron atacados afuera de una tienda Oxxo en la calzada Independencia y calle Monte Calvario, por un individuo que les arrojó una granada de fragmentación, pero fue detenido.
El ataque causó daños a la tienda, a un automóvil y a una caseta telefónica. La policía encontró en el sitio un rifle R-15, un chaleco antibalas y una mochila con unos mil cartuchos útiles.
La agencia Notimex reportó que la policía jalisciense revisó el domicilio del atacante, en la calle José María Lozano, colonia Lomas de Independencia, donde había 12 escopetas calibre 40; 14 granadas de fragmentación; cinco rifles AR-15; tres AK-47; dos G-3, dos M-16, y seis pistolas.
Erneso Martínez E., Javier Valdez C., Sergio Ocampo A., Misael Habana, Silvia Chávez González, Carlos García, Ulises Gutiérrez Ruelas, Saúl Maldonado, Mauricio Ferrer y Octavio Vélez Ascencio, corresponsales