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Festival de México

Chunky Move viene por primera vez a México y presentará la obra Máquina mortal

Reflejan cómo los límites del cuerpo humano son una ilusión

Reconstruimos aspectos del comportamiento de las personas mediante la luz y el sonido, dice el director y fundador de la compañía australiana

Darán cuatro funciones en el teatro Julio Castillo

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Charmene Yap (arriba) y Harriet Ritchie participan en la obra Máquina mortalFoto Andrew Curtis
 
Periódico La Jornada
Martes 10 de marzo de 2009, p. 4

Pionera en presentar obras de danza con nuevas tecnologías, la compañía australiana Chunky Move vendrá por primera vez a México y traerá Máquina mortal al Festival de México en el Centro Histórico, consistente en proyecciones de video y luces mediante rayos láser que responden al movimiento del cuerpo humano para generar un mundo luminoso.

El director y fundador del grupo, Gideon Obarzanek, en entrevista telefónica, señaló que la mayoría de sus propuestas tienen en común explorar el comportamiento de las personas, las sensaciones del deseo y los conflictos que las rodean.

La temática son los conflictos en general, el comportamiento humano que a veces no es racional. Estos aspectos son reconstruidos con luz y sonido; el resultado puede ser divertido y otras ocasiones no lo es.

Al referirse a la obra, aclaró que no es una historia, pues sólo trata de explicar con movimiento las situaciones que le preocupan e interesan.

En escena se ven cuerpos que están juntos y después se separan como un tipo de relación; la tecnología se usa para hacer conexión con el público. Utilizo la sombra del bailarín para el espectáculo y así mostrar que hay otros elementos en la misma persona. Son los diferentes aspectos de las relaciones humanas.

Energía cinética y metamorfosis

Para Obarzanek, estar sentado y sentirse bien consigo mismo puede ser una problemática para el hombre. Por eso mediante la luz muestra las extensiones que puede alcanzar el cuerpo.

En Máquina mortal los límites del cuerpo humano son una ilusión; la energía cinética fluye y provoca una metamorfosis de la figura humana en una imagen mágica. La coreografía está enfocada al movimiento de seres sin forma en un paisaje desconocido que buscan conectarse y envolverse una y otra vez.

Muerte, sexualidad y deseo se mezclan para representar lo más perfecto o siniestro del alma.

Obarzanek explicó que todos tenemos una conexión con las personas que nos rodean, pero el sentimiento de soledad al vivir en un mundo tan grande provoca que cada quien siga de manera automática su camino sin ver la presencia del otro.

“Los cuerpos en el escenario siempre son vistos como una forma dual por el público. En un sentido delinean formas en un espacio vacío, pero en otro, la danza tiene también un significado dramático. Nuestro trabajo tiende a fluctuar entre estas dos expectativas.

Todo es una conexión. Es un espectáculo de danza que tiene como soporte imágenes, luz y sonido.

Detalló que cada obra requiere de cinco semanas en las que se cotejan propuestas tanto técnicas como artísticas; las ideas que surgen se documentan y posteriormente se hace una selección.

Después la compañía regresa a su estudio en Melbourne otras siete semanas para trabajar con las propuestas hasta crear sólo una pieza con diseños trabajados en la computadora y con la participación de bailarines y actores.

La compañía, creada en 1995, se ha presentado en Corea del Sur, Singapur, Japón, Rusia, Polonia, Bélgica, Suiza, Francia, Hungría, Alemania y Colombia.

Máquina mortal, que se estrenó recientemente en el Festival Internacional de Edimburgo, se presentará los días 19 y 20 de marzo a las 20:30 horas, y el sábado 21 a las 17 y 20:30 horas, en el teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque (Paseo de la Reforma, esquina Campo Marte). Los precios de los boletos son: 250, 350 y 450 pesos.