Número 149
Jueves 3 de diciembre
de 2008
Director fundador
CARLOS PAYAN VELVER
Directora general
CARMEN LIRA SAADE
Director:
Alejandro Brito Lemus
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La medicación antirretroviral (ARV) es eficaz no sólo para paliar los efectos del VIH sino para prevenir nuevas infecciones. La evidencia muestra que cuando el nivel de virus en la sangre es indetectable —reducirlo es la función de los medicamentos— la capacidad de transmitirlo también se desploma. Para lograr el efecto preventivo, sin embargo, deben cumplirse varios escenarios, todavía lejanos en México. El médico Gustavo Reyes Terán, especialista en VIH y Jefe del Centro de Investigación en Enfermedades Infecciosas del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias habla con Letra S sobre el tema:
¿Realmente funcionan los ARV para prevenir el VIH?
Sí, cuando la persona con VIH los toma de forma adecuada, bajo buena prescripción médica y vigilancia de los efectos adversos. En los primeros seis meses el descenso de la carga viral por el tratamiento es cercano al 99.9 por ciento. El resultado es que la cantidad de virus en los líquidos corporales, en la enorme mayoría de los casos, es bajísima y las probabilidades de transmitirlo son muy pequeñas, probablemente cercanas al riesgo que existe cuando se utiliza un condón.
Si bien el uso correcto de los ARV es una excelente arma para disminuir la tasa de transmisión del VIH, eso no quita que se siga promoviendo el uso del condón.
¿Cuál es el uso correcto de los medicamentos
ARV para convertirlos en herramientas preventivas?
Más del 80 por ciento de los pacientes mexicanos que están iniciando terapia ARV tienen conteos de menos de 200 células CD4 del sistema inmune, es decir, adquirieron la infección entre seis y 10 años atrás. Si detectáramos la infección unos cinco años antes —pues probablemente todos estos pacientes han requerido ARV entre tres y cinco años antes de recibirlos—, eliminaríamos esos años de alto riesgo de transmisión. Pero además de la detección oportuna es necesario contar con un buen sistema de vigilancia, una prescripción adecuada y una buena adherencia de los pacientes. Hoy en México, en la gran mayoría de los casos, no se cumple ninguno de estos factores.
¿Qué porcentaje de pacientes mexicanos bajo
tratamiento anti sida tienen niveles virales indetectables?
No lo sabemos porque no ha habido un buen sistema de atención y vigilancia del tratamiento ARV. Es un programa que tiene que echarse a andar para exigirle cuentas a cada uno de los médicos del país que están viendo pacientes con VIH. Hay casos exitosos, como el del Hospital Civil viejo en Guadalajara, donde cerca de 90 por ciento de los pacientes están indetectables, una estadística comparable a los mejores lugares del mundo. Ese es el mejor ejemplo, el peor no lo sé, pero se lo pelean en varios estados; en muchos casos ni siquiera saben cuántos pacientes con carga viral indetectable tienen.
¿Cuáles son las perspectivas para la prevención del VIH en el futuro?
El centro es y seguirá siendo la educación y el uso del condón. Si pudiéramos diseñar y ejecutar un programa ideal para evitar la transmisión de la infección deberíamos incluir, en este orden: 1. difusión del uso del condón, 2. detección oportuna, 3. uso temprano de ARV, de acuerdo a las guías nacionales e internacionales, con una buena prescripción, 4. buena vigilancia de los efectos adversos de los ARV y, 5. promoción y educación para la adherencia. Cuando esto se cumpla, los ARV van a ser extremadamente eficaces para prevenir nuevas infecciones por VIH.
S U B I R |
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