México D.F. Martes 9 de noviembre de 2004
Comenzó el seminario Malraux para el
intercambio de experiencias con Francia
México, sin una industria cultural para impulsar
a ''sus nuevos valores'': Derbez
MERRY MAC MASTERS
México
carece de una industria cultural que en verdad pueda promocionar en el
mundo a sus ''nuevos valores", ya sea ''en películas, televisión,
en libros, exposiciones y diseño", expresó ayer Luis Ernesto
Derbez, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE),
al término de la inauguración del Seminario Malraux sobre
Diversidad Cultural, Industrias Culturales y Políticas Públicas,
organizado en la sede de la cancillería para que los franceses hablaran
de su experiencia en la materia.
Lo anterior se hizo a raíz de la próxima
llegada a México del ministro galo de cultura, quien viene acompañando
del jefe del gobierno francés, pues el tema cultural será
de relevancia en el programa de esa visita.
El 22 de octubre, recordó Derbez, se firmó
un acuerdo con Francia ''para dar un impulso binacional a la industria
cultural. Vamos a concentrarnos en cine y la edición de libros para
que haya un mejor conocimiento de nuestros autores jóvenes, editores,
nuevos directores y actores".
Momentos antes el funcionario había dicho que el
Estado ''no puede renunciar a su papel de promotor e impulsor de la cultura
que da a cada país identidad nacional".
Se estima que las industrias culturales (publicaciones
periódicas, libros, fonogramas, radio, televisión, cine y
el impacto de nuevas tecnologías) en México en los años
recientes ''han contribuido con casi 7 por ciento del producto interno
bruto. Esto sitúa al sector cultural como el cuarto de mayor importancia
en el país después de la industria maquiladora, el petróleo
y el turismo. No obstante, el porcentaje del gasto público dedicado
a este sector apenas alcanza 0.05 por ciento del PIB".
También encabezaron el acto inaugural Richard Duqué,
embajador francés en México, y Sari Bermúdez, titular
del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, quien se limitó
a expresar: ''¡Bravo, bravo!", al término de la intervención
del canciller.
Preservar y engrandecer la cultura
Al comenzar los trabajos, Catherine Ahmadi-Ruggeri, cuyo
tema fue Diversidad cultural e industrias culturales: La estrategia
francesa, aseguró que en los países desarrrollados la
cultura genera ''alrededor de 7 por ciento" y el 3 por ciento en países
en desarrollo. Entrevistada después, dijo que para calcular dichas
cifras habría que ver cómo califica a las industrias culturales.
Para Paul Tolila, quien habló sobre ''economía
de la cultura", el problema de las industrias culturales es ''de cada país
frente a ese increíble poder que representa Estados Unidos en ese
terreno".
Planteó la necesidad no sólo de preservar,
sino de ''hacer más grande nuestra cultura porque un pueblo que
no participa en la elaboración de la cultura del mundo es un pueblo
frustrado, que pierde su fuerza".
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